Cristian Reino
Barcelona
Viernes, 2 de junio 2023, 11:52
Laura Borràs ha tirado de victimismo nacionalista el día después de perder su escaño como diputada y cesar como presidenta del Parlament. Envuelta en la 'estelada', ha lanzado un mensaje a ERC y otro en clave interno, a su partido. A los republicanos, les ha ... acusado, junto al PSC y la CUP, que fueron las tres fuerzas que votaron ayer a favor de dejar sin efecto su acta de parlamentaria en la Mesa, de ser un «actor de la represión».
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A su juicio, en este caso, la Mesa del Parlament ha actuado de manera proactiva para quitarle el escaño y apartarla como presidenta del Parlament. «Es bastante grave, vulnerar los derechos de los electores es mucho más que un error», ha asegurado en Catalunya Ràdio. A pesar de que ella misma, cuando era presidenta del Parlament, acató la retirada del escaño a Pau Juvillà, ha lamentado que la Mesa no haya obedecido al pueblo de Cataluña.
Y en clave interna, hacia su partido, ha advertido de que seguirá presidiendo la formación. Hay sectores de su partido que piden su cabeza y que tras ser condenada por delitos relacionados con la corrupción, consideran que debería renunciar a su cargo al frente del partido. Además, la dirigente se niega a entrar en el debate de quién debe sustituirle al frente de la Cámara catalana. Abordar este asunto antes de tiempo, le parece que es hacerle el juego a la represión, a pesar de que hace meses que desde su partido se están filtrando nombres.
Este mismo viernes, el candidato a la alcaldía de Barcelona, Xavier Trias, se ha mostrado partidario de que un diputado de Junts releve a Borràs en la presidencia del Parlament. «No hemos querido abordar esta cuestión aún porque no hemos querido pasar de pantalla», ha afirmado la expresidenta. «No queremos colaborar y normalizar la situación», ha señalado. La ejecutiva de Junts abordará este martes el relevo de la presidencia del Parlament.
ERC está dispuesto a votar el candidato que proponga Junts. Pero han de llegar a un acuerdo. De momento, PSC y comunes presionan, presentando sus propios aspirantes. Assumpta Escarp es la candidata de los socialistas y Joan Carles Gallego, el de los comunes. En caso de que ERC y Junts no se pusieran de acuerdo, la presidencia podría acabar llevándosela el PSC, por ser la primera fuerza de las autonómicas.
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