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Melchor Sáiz-Pardo
Sábado, 12 de diciembre 2015, 13:46
19 horas después de la primera versión de Mariano Rajoy negando que el atentado de Kabul fuese contra la Embajada española, el Gobierno, a través de una nota de prensa, matiza sus explicaciones. El Ejecutivo, que ahora habla de "atentado en la Embajada de España", asegura que la acción de los talibanes es "un ataque contra España y contra su colaboración en la consolidación de la democracia en Afganistán", dado que, "en cualquier caso, estamos ante un ataque terrorista en el que han fallecido dos ciudadanos españoles y en el que nuestros intereses han sufrido graves daños". De hecho, Interior ha convocado para esta tarde el denominado Pacto Antiyihadista.
"A esta hora se mantiene abierta la investigación para esclarecer todos los detalles del atentado. Aunque un comunicado de los terroristas y la información de la propia policía afgana señalan que el objetivo del atentado no era la embajada de España, se mantiene abierta la investigación y no se descarta ninguna hipótesis", recalca presidencia del Gobierno.
El relato de hechos oficial facilitado por el Ejecutivo es que el ataque comenzó a las 14 horas (hora peninsular española) con una fuerte explosión de un coche-bomba "junto al recinto de la Embajada de España en Kabul causando graves daños a los locales de la cancillería".
A esta explosión sucedió un tiroteo que duró aproximadamente una hora. Tres de los integrantes del grupo terrorista entraron en los locales del 'compound' de la Embajada compuesto por tres edificios.
"Como consecuencia de la explosión del coche bomba falleció de forma inmediata el subinspector del Cuerpo Nacional de Policía don Jorge García Tudela, cuyos restos no se encontraron hasta que finalizó el asalto", asegura el Gobierno. Asimismo, resultó herido el policía nacional don Isidro Gabino San Martín, que pudo ser rescatado con vida pero que falleció cuando era trasladado al hospital.
En el ataque también fueron asesinados dos empleados de la Embajada de nacionalidad afgana. El resto del personal que se encontraba allí pudieron ponerse a salvo al refugiarse en dos 'búnkeres' de la legación española. Fueron liberados ilesos después de una intervención de fuerzas especiales afganas y de unidades norteamericanas que duró varias horas.
Investigación abierta
Por su parte, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha afirmado en León que el atentado "es un ataque a España". Tras visitar en el municipio leonés de la Virgen del Camino a la familia del policía asesinado Isidro Gabino San Martín, Fernández Díaz ha declarado a los periodistas que el Ministerio no descarta hipótesis sobre los autores y sus objetivos, por lo que la investigación sigue abierta para esclarecer lo ocurrido.
"Estamos ante un ataque terrorista en el que han fallecido dos ciudadanos españoles y en el que nuestros intereses han sufrido graves daños, es por tanto un ataque contra España y contra su colaboración en la consolidación de la democracia en Afganistán", ha resumido el ministro.
El titular de Interior ha puntualizado que en un primer momento tanto la investigación a cargo de las autoridades afganas como las reivindicaciones terroristas del atentado hacían referencia al ataque a la casa de huéspedes aledaña a la delegación española.
Aunque en todo momento se referían como objetivo a este edificio, el ministro ha remarcado que lo que "está fuera de toda consideración es que han sido dos españoles y dos trabajadores afganos que prestaban servicio a la embajada los que han sido asesinados".
Ha subrayado que ése ha sido el resultado final del atentado "más allá de las intenciones o las reivindicaciones de los terroristas".
Fernández ha tenido un recuerdo "emocionado" para los nueve policías que formaban el equipo de seguridad de la Embajada, en especial para los dos fallecidos y para Juan Luis García Morán, hospitalizado y que fue el que intentó rescatar al policía leonés Isidro Gabino San Martín, quien murió "en sus brazos" cuando era trasladado al hospital.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, va a conceder la Medalla de Oro al Mérito Policial -máxima condecoración policial- a los dos agentes fallecidos.
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