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Martes, 7 de abril 2015, 10:57
Un vecino de La Coruña ha protagonizado un insólito suceso al más puro estilo Robin Hood. Eso sí, en su caso, el 'cuento' no tuvo un final feliz: sus hechos le costaron la detención con pase a disposición judicial. Y todo por una apuesta. Ocurrió el pasado sábado en el barrio de Cuatro Caminos. Al parecer, y según publica 'La Voz de Galicia', tres amigos caminaban de madrugada por la zona cuando vieron que un repartidor de bollería paraba su furgoneta frente a un bar. Tras comprobar que el hombre se había dejado puestas las llaves uno de ellos retó a sus amigos a robar el camión.
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Uno de ellos aceptó el desafío, se subió al vehículo y lo condujo por varias calles de la ciudad, recorrido que terminó en los alrededores de otro bar. Allí lo estacionó en doble fila, abrió las puertas del furgón -como recoge la citada publicación- y procedió a repartir los dulces -cruasanes, palmeras o napolitanas- entre la clientela del establecimiento, donde finalmente fue arrestado por agentes de la policía. El detenido -que se acogió a su derecho a no declarar- fue puesto en libertad con cargos acusado de robo de vehículo y atentado a la autoridad.
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