Cristian Reino
Martes, 24 de marzo 2015, 14:58
Con semblante compungido o lágrimas en los ojos, familiares de las víctimas del accidente del A320 de la aerolínea alemana Germanwings, que se estrelló este martes cuando volaba de Barcelona a Dusseldorf, acudían al aeropuerto español en una búsqueda desesperada de noticias.
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El drama de la catástrofe se refleja en las caras de los familiares de las víctimas en el aeropuerto de Barcelona. Jordi Campoy, un amigo de dos de las posibles víctimas, ha relatado que sus amigos trabajaban en la farmacéutica Bayer. Entre ojos vidrisos, muchos nervios y desolación, antes de entrar al centro de coordinación de atención a las víctimas que ha habilitado la Generalitat aún confiaba en que todo fuera una pesadilla, la peor de su vida. "Estamos espantados, esperemos que sea una equivocación", ha afirmado entre una nube de periodistas. El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha anunciado que en breve hará público el listado de víctimas.
La información aún así no es del todo fluida en el aeropuerto de Barcelona, ya que Germanwings, la compañía del vuelo siniestrado, carece de oficina en el aeródromo barcelonés y el punto de atención es a través de la compañía Swissport. Los Mossos d'Esquadra acompañan a los familiares, que han empezado a llegar con cuentagotas a partir de las 13 horas. Una vez en el aeropuerto, son conducidos al llamado bloque técnico, el edifico que Aena y la compañía aérea han habilitado en el aeródromo barcelonés. Allí les espera un equipo de psicólogos.
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