Un coche kamikaze con 15 inmigrantes entra en Melilla por la frontera de Beni Enzar

El vehículo, un turismo marca BMW con matrícula de Marruecos, logró burlar el control marroquí del paso internacional de Beni Enzar y dirigirse velozmente hacia la frontera española. Sin embargo, su rumbo zigzagueante, consecuencia de su vertiginosa huida hacia Melilla, le llevó a chocar contra parte de los portones que dan entrada a los controles policiales españoles, donde el coche quedó empotrado.

Según pudo comprobarse, en el automóvil viajaban 15 subsaharianos, todos varones y mayores de edad. De ellos, cinco lograron bajarse y adentrase en suelo español, antes de que el automóvil y el resto de los ocupantes fueran interceptados por las fuerzas de seguridad de Marruecos.

En este momento, las Fuerzas de Seguridad españolas investigan la identidad de los inmigrantes que han logrado acceder a Melilla y se evalúan los daños que el vehículo ha ocasionado en el exterior de la verja fronteriza de Beni Enzar, por si fuera necesario arreglar el portón para su correcto funcionamiento o si debiera sustituirse por otro nuevo.

El suceso de esta madrugada, según informa la delegación del Gobierno en Melilla, estaría vinculado con los que ya se transcurrieron en enero y febrero de 2013, cuando varios coches intentaron a toda velocidad vulnerar de igual modo algunos de los puestos fronterizos que unen la ciudad autónoma de Melilla con la provincia marroquí de Nador.

Desde la delegación gubernativa en Melilla informan de que esta forma de entrada tan violenta es parte de esa presión que el fenómeno migratorio ejerce sobre Melilla especialmente en los últimos años.

Dos horas después de este incidente, el dispositivo antiintrusión en el perímetro fronterizo melillense era activado por la posibilidad de que varios grupos de inmigrantes subsaharianos que descendían las laderas del monte Gurugú pudieran acercarse demasiado al vallado. Finalmente, la labor preventiva y disuasoria del helicóptero de la Benemérita junto al trabajo de las fuerzas auxiliares marroquíes no ha concedido posibilidad alguna de acercarse a Melilla a los inmigrantes.