El PP rechaza una moción que le acusa de restringir libertades

El PP impidió ayer con su mayoría absoluta que el Congreso acusase a los Ministerios de Interior y Justicia de estar inmersos en políticas de «restricción de libertades» a través de una moción de Equo-Compromís que fue apoyada por el PSOE, IU, UPyD y el PNV, y en la que CiU se abstuvo.

La iniciativa, que fue una censura general a las medidas y reformas puestas en marcha y todavía en cartera de los departamentos de Jorge Fernández Díaz y Alberto Ruiza-Gallardón, reclamaba, entre otras cosas, la anulación de la ley que restringue la justicia universal, el indulto para las decenas de sindicalistas condenados por participar en piquetes de huelga, el final de las medidas de gracia para sentenciados por corrupción, la reducción del número de aforados, y la retirada de los proyectos de ley sobre seguridad ciudadana y aborto y su no envío al Congreso.

Joan Baldoví, el promotor de la moción, criticó con dureza a Mariano Rajoy porque dijo que mientras hace días que solo habla de medidas de regeneración democrática, en coincidencia con el mal resultado del PP en las europeas, «afora a exmonarcas, presiona a los jueces que persiguen a los genocidas, amenaza a sindicalistas y persigue a las mujeres que quieren abortar». En su opinión, antes de presentar nuevas propuestas regeneradoras «tiene que hacer un curso intensivo de verano para saber qué es eso».

La portavoz del PP, Sara Cobos, justificó el rechazo a las demandas de la oposición porque aseguró que el Gobierno, lejos de cercenar derechos de los ciudadanos, trabaja para garantizarlos. De igual forma, indicó que todas las peticiones eran «un batiburrillo» sin sentido que ya había sido debatido antes en el Congreso y que lo que hacen falta son propuestas en positivo para mejorar la calidad democrática del país, como las del PP.