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Cristian Reino
Miércoles, 4 de junio 2014, 12:06
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, podría plantar al futuro Rey de España en el día de su proclamación, el 18 de junio, lo que se entendería como un gesto de ruptura de las instituciones catalanas con la jefatura del Estado. Mas ha confirmado esta mañana que aún no ha decidido si acudirá a la ceremonia, que coincide con un viaje que la Generalitat tenía previsto hacer a California, entre el 16 y el 21 de junio.
"Hace seis meses que tengo previsto un viaje a EEUU y desmontar un viaje como este es muy difícil", ha afirmado esta mañana. "Hasta que la fecha de la proclamación no sea definitiva no decidiré si puedo asistir o no", ha añadido. La Generalitat contempla en estos momentos mantener el viaje, que tiene un marcado carácter económico, y por tanto quien representaría al Gobierno catalán sería la vicepresidenta, Joana Ortega.
La coincidencia de fechas entre el viaje y la proclamación es una patata caliente para Mas, porque si acude a la ceremonia en la que Felipe VI será designado Rey de España, los sectores más independentistas lo considerarán un gesto de debilidad y sumisión en pleno proceso sobranista, mientras que si no va, estará enviando una señal de desconexión entre Cataluña y el resto de España.
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