Un recorrido por los 60 años del Ford Mustang

En 1965, Henry Ford II contrató a Carrol Shelby, que crearía la carrocería Fastback, sobre la que desarrollaría su famoso Shelby GT350 con motor V8 y 306 CV de potencia, presentado en enero de 1965. Un año más tarde, le tocaría el turno al modelo más emblemático de la familia, el GT500, con un V8 de 355 CV bajo su capó. Para 1966, las ventas del Mustang superaron el millón de unidades, consolidando su posición como un éxito comercial y un símbolo perdurable de la cultura automovilística mundial.

Los Mustang de 1971 fueron los más grandes jamás fabricados, llegando a medir 4,81 metros. Estos vehículos imponentes presentaban un diseño robusto y una presencia dominante en la carretera. Nada ejemplifica mejor el impacto del Mustang que un comunicado de Ford anunciando el nacimiento del nuevo modelo, y dirigido a los medios para su publicación el 13 de abril de 1964, poco antes de la apertura de las puertas al público de la Feria Mundial de Nueva York:

«En el Mustang, Ford ha creado tres 'personalidades' diferentes para hacerlo realmente distinto a cualquier otro vehículo de producción que haya salido de una cadena de montaje americana: un coche económico, un coche de altas prestaciones, o un coche de lujo de gran estilo orientado a la economía de funcionamiento o a las prestaciones de un vehículo deportivo. Su bajo coste inicial, unido a un estilo de alta gama, un manejo fácil y preciso, una excelente conducción, una gran cantidad de opciones y la posibilidad de elegir entre altas prestaciones y un vehículo compacto y económico, permiten al Mustang abarcar varios de los principales segmentos del mercado de coches nuevos».

El Mustang II, producido entre 1974 y 1978, fue concebido en respuesta a la crisis del petróleo de 1973, que elevó los precios del combustible. Creado sobre la plataforma Arizona que utilizaba el Ford Pinto, estaba adaptado a las regulaciones de seguridad de la época. Este modelo era más compacto que sus predecesores, con una longitud de 4,44 m y una importante reducción de peso, superior a los 200 kg.

Este modelo destacaba tanto por su conveniencia, economía y detalles propios de vehículos premium, como por su diseño deportivo, llantas de acero estilizadas y un interior suave con alfombras de pelo corto. En 1974, ganó el prestigioso premio Car of the Year de la revista Motor Trend.

Inicialmente equipado con un motor V6 de 2.8 litros, caja de cambios manual de cuatro velocidades, dirección de cremallera y piñón y frenos de disco delanteros, el Mustang II ofrecía un rendimiento muy eficiente. Estaba disponible en versiones de dos y tres puertas; esta última proporcionaba un amplio acceso trasero y asientos reclinables para mayor comodidad. El V8 dejó de estar disponible, si bien un año más tarde volvería a escena con una potencia de 130 CV.

El año de su estreno, Ford vendió 386.000 unidades. Su precio se situaba entre los 3.134 y los 3.674 dólares americanos. En esta época, destacan el Mustang Cobra II con un motor de 4.9l V8 y 137 CV, y el Mustang King Cobra que montaba un V8 de 5.4l con 142 CV. Además, se introdujo una versión con volante a la derecha del Mustang II en Reino Unido, ampliando su alcance internacional.

En 1979, debutó la plataforma Fox, una nueva arquitectura para modelos más anchos y largos que el Mustang II, pero sensiblemente más ligeros (90 kilogramos menos). La nueva generación adoptó un elegante estilo europeo que cambió los rasgos típicos del Mustang, generando opiniones diversas.

Las opciones de motorización iniciales incluían el motor de cuatro cilindros y 2.3 litros con árbol de levas y transmisión manual de 4 velocidades. También estaba disponible con un bloque V6 opcional de 2.8 litros, o uno V8 de 5.0 litros. A lo largo de los años, se realizaron ajustes para cumplir con las regulaciones de emisiones y mejorar la eficiencia, lo que resultó en variaciones de la potencia y el rendimiento.

Sin embargo, a medida que la década de los 80 avanzaba, el Mustang fue recuperando su esencia de altas prestaciones, con la reintroducción de modelos como el GT (1984), y el Convertible (1983), el primero desde 1973. En 1986 se introduce el sistema de inyección electrónica.

Finalmente, el Mustang Cobra diseñado por el equipo Special Vehicle Team (SVT) en 1993 fue el culmen de esta generación, ofreciendo un rendimiento optimizado y detalles exclusivos para los más apasionados. Este modelo de alto rendimiento estaba equipado con un motor V8 y mejoras en la suspensión, frenos y estilo. El Cobra se convirtió en un favorito entre los entusiastas del Mustang.

Como detalle curioso, durante esta generación se fabricó una edición especial: por el 25 aniversario de Mustang, todos los vehículos producidos entre el 17 de abril de 1989 y el 17 de abril de 1990 llevaron el típico logo del caballo corriendo con una inscripción de «25 años». El Ford Mustang Mach III se presentó en 1992 como un emocionante concepto. Aunque no llegó a la producción en serie, su diseño influyó en futuros modelos del icono americano.

La cuarta generación de Ford Mustang representó una importante renovación para este emblemático vehículo, con el objetivo de atraer tanto a conductores jóvenes como a los más experimentados. Conocida internamente como «SN95», esta generación se basó en una versión actualizada de la plataforma Fox.

El diseño distintivo del Mustang de esta época combinó líneas elegantes y deportivas, destacando un capó largo y laterales esculpidos que evocaban su legado icónico, en un estilo retro-moderno. En términos de rendimiento, inicialmente se ofrecieron motores estándar V6 de 3.8 litros y V8 GT de 5.0 litros, ambos equipados con inyección electrónica secuencial para un desempeño óptimo. Además, se priorizó la seguridad, incluyendo características como bolsas de aire duales y frenos de disco en las cuatro ruedas.

La renovación de estilo en 1999, con motivo del 35 aniversario, se llamó New Edge. Añadió un toque contemporáneo con contornos más afilados, y todos los modelos de ese año recibieron emblemas de «35 años» conmemorando el aniversario. La generación evolucionó incorporando motores cada vez más potentes que superaban con solvencia los 300 CV, además de lanzar varias ediciones especiales como el Mach I (2003), o el Mustang Bullitt GT (2001).

Este último se basa en el Mustang GT. Con un motor modificado de 4.6 litros SOHC V8, el Bullitt destacaba por su excepcional comportamiento, estilo mejorado y frenado más corto en comparación con otros GT que no eran Cobra. Su interior retro y detalles como el aluminio pulido y los rotores rojos lo convirtieron en un modelo muy deseado. En 2004, para celebrar la producción de la unidad 300 millones, Ford relanzó el arrendamiento de Mustang por 5 dólares al día.

El Mustang de quinta generación se inspiró en la primera generación (1964 - 1973), con su distintiva parrilla inclinada hacia delante y luces traseras de tres barras. El objetivo era revivir el diseño clásico de los años 60 en un automóvil rápido, divertido y eficiente.

En términos de rendimiento, en 2005, el modelo estándar presentaba un motor V6 de 4.0 litros con 210 CV, mientras que el Mustang GT ofrecía un motor V8 de 4.6 litros con hasta 300 CV. El punto culminante en rendimiento fue el Mustang Shelby GT500 de 2013, con 500 CV, haciéndolo uno de los vehículos más veloces del mundo.

En cuanto a los logros en competición, en 2005, Ford lanzó una serie de vehículos de carreras basados en el Mustang, el FR500C, que más tarde ganó dos campeonatos consecutivos en el Grand-Am Koni Challenge. El Mustang 2010 introdujo un diseño renovado y mejoras en la mecánica. En 2011, toda la línea del Mustang recibió motores actualizados, incluyendo bloques V6 y V8 con transmisiones automáticas o manuales de seis velocidades. En abril de 2014, se celebró el 50 aniversario de Mustang con un evento internacional en Las Vegas Motor Speedway y Charlotte Motor Speedway.

La sexta generación del Mustang marcó un hito al convertirse en la primera versión comercializada y vendida a escala global. Su visión de alcance mundial se destacó al ser el primer Mustang ampliamente disponible en Europa.

Destacando su compromiso con la tradición y la innovación, esta generación se mantuvo fiel a su legado al ser la última en mantener una combustión interna pura. Durante su ciclo de vida, el Mustang de sexta generación se consagró como el vehículo deportivo más vendido del mundo 1 , con una fuerte presencia tanto en Estados Unidos como en otros países como Alemania, Reino Unido y Suiza.

En cuanto a su diseño, la aerodinámica fue privilegiada, complementada por una carrocería moderna y ópticas renovadas, incluyendo luces LED para la circulación diurna. Asimismo, destacó por ser la primera generación en ofrecer la opción de un motor de cuatro cilindros y 2.3l EcoBoost con 310 CV, equipado con turbocompresor e inyección directa, lo que permitió alcanzar altas prestaciones con bajas emisiones. A esta generación pertenece también el Mustang GT con motor V8 de 450 CV. En 2016 llegaría el Mustang California. En 2021 se presenta el Mustang Mach 1, con motor V8 de 5.0l y 460 CV.

Este año llegará a los concesionarios la séptima generación del Mustang, con un motor 5.0 V8 de 450 CV, y con una nueva parrilla, rejillas de ventilación en el capó, nuevos faros LED triple barra, pinzas de freno Brembo de 19 pulgadas, nuevas llantas de 19 pulgadas, así como múltiples entradas de refrigeración del bloque motor y los frenos.

En cuanto al interior, destaca un cluster digital de 12,4 pulgadas con gráficos personalizables, una pantalla táctil central de 13,2 con tecnología Unreal Gaming, el Ford Co-Pilot 360, actualizaciones inalámbricas, iluminación de aproximación al vehículo con el logo del Pony en suelo, así como un sistema de sonido B&O de Bang & Olufsen - 12 altavoces de alto rendimiento con una potencia de 860 vatios.