En Noruega cuatro de cada cinco coches vendidos son eléctricos

Todos los incluidos en la lista de los diez modelos más vendidos son eléctricos y el líder de ventas es Tesla, con el 12,2% del total. El coche más comprado del año fue el Tesla Model Y, con 17.356 unidades y que se convierte en el coche más vendido en solo un año de la historia de Noruega.

Estas cifras permiten al gobierno de Oslo considerar factible el objetivo de dejar de vender coches con motores de combustión en 2025 y presumir de transición energética entre los socios europeos, pero también cabe decir que si los consumidores noruegos optan tan masivamente por los eléctricos es porque las ventajas fiscales están siendo también masivas.

Los coches híbridos y eléctricos están exentos de IVA, que para el resto de vehículos es del 25%, además de liberarse de la tasa por emisiones de CO2. De ahí que los compradores se decanten muy mayoritariamente por el modelo eléctrico libre de impuestos.

El año pasado, el porcentaje de coches eléctricos vendidos fue ya del 65% y el Estado noruego comenzó a resentirse de la consecuencia indirecta: dejó de recaudar 1.800 millones de euros que, sin embargo, está dispuesto a recuperar.

Tras la renovación de buena parte del parque móvil por modelos eléctricos, la fiscalidad de estos vehículos ha comenzado ya a cambiar en Noruega a gran velocidad. Para empezar, ya se ha introducido una nueva tasa vinculada al peso de cada coche que les afecta de manera especial.

Los eléctricos con baterías superiores a los 70 kWh pesan más de 2.500 kilos y la tarifa ha sido diseñada en forma lineal, de forma que solo los primeros 500 kilos estarán exentos, mientras que el resto pagará a razón de 12,5 coronas noruegas por kilo y año, unos 1,20 euros por kilo. Y los vehículos con un precio superior a las 500.000 coronas noruegas, que al cambio son más de 47.000 euros, pagarán IVA a partir de 2023, por lo que su precio aumentará un 25%.