Furgonetas camufladas de la DGT: Así pueden identificarse

Pasan inadvertidas, pero están distribuidas por toda la red de carreteras españolas. ¿Objetivo? Vigilar y perseguir desde el anonimato las posibles infracciones que se cometen al volante, especialmente, desde la entrada en vigor este pasado mes de marzo de la nueva Ley de Tráfico y Seguridad Vial.

A los dispositivos habituales de la Dirección General de Tráfico (DGT), entre ellos, helicópteros, drones, vigilancia en carretera y radares fijos, se encuentran 15 furgonetas camufladas, que ahora más que nunca se fijan en las distracciones mientras se conduce. Solo sostener el móvil en las manos, aunque no se esté utilizando, conlleva una multa de 200 euros y la retirada de seis puntos del carné de conducir.

Y estas furgonetas, en su mayoría son Ford Transit Custom de color blancas (también las hay negras y azules), al ser más altas amplían el campo de visión de los agentes a la hora de identificar a los infractores que manipulan algún dispositivo electrónico, o que no llevan a los menores con sus correspondientes sistemas de retención o que algún ocupante va sin cinturón de seguridad.

Ninguno de estos vehículos llevan identificación de la DGT, precisamente, porque el fin es que los conductores no se percaten de su presencia. Sin embargo, hay un detalle muy particular más allá de que los agentes que van en su interior lleven uniforme. Se trata de la matrícula, que como el resto de vehículos de las administraciones del Estado llevan fondo blanco y caracteres en negro. En ella pueden leerse las iniciales PGC (Parque Guardia Civil), a las que a continuación sigue un bloque de cuatro cifras y una letra que identifica a los vehículos de la Guardia Civil.