Marbella Vice: el videojuego

«Eran unos gamberros, pero eran todos unos profesionales», recuerda Daniel Yagües de Álex de la Iglesia y su equipo, quienes después de cada jornada de rodaje acudían al bar que entonces regentaba, Veneno, en la calle Jacinto Benavente. El director vasco, hasta entonces solo conocido por su ópera prima, 'Acción Mutante, fue contratado por la empresa bilbaína de videojuegos Picmatic S.A. para grabar las escenas de vídeo de un arcade de disparos con pistola, 'Marbella Vice', que cumple treinta años y vuelve a la actualidad tras la recuperación del contenido de los tres laserdisc por parte de las asociaciones preservacionistas Arcade Planet, A.R.C.A.D.E y Team Recreativas.org.

Lanzado al mercado en 1994, en un momento en que la palabra 'multimedia' empezaba a sonar en los medios de comunicación y un año antes del lanzamiento de Windows 95, 'Marbella Vice' contó con un nivel de producción inaudito para los estándares de entonces. El videojuego ilustraba el esperpento de una época, la gilista, que inspiró la desmesura y lo deliberadamente hortera. Lo hizo con gran sentido del humor y parodiando los códigos del cine de acción de su época, pero no fue un gran éxito comercial, a pesar de que se dobló también al inglés un poco de aquella manera. La vinculación de Marbella y el narcotráfico ya era una realidad, pero los videojuegos no se tomaban en serio, al menos no como ahora.

'Marbella Vice' fue el segundo videojuego en laserdisc en España, un formato digital malogrado por el advenimiento y popularización del CD-ROM. Picmatic, la empresa que lo desarrolló, ya había contratado para el videojuego 'Los justicieros' al director de cine Enrique Urbizu y al cómico Mariano 1.85 , que se encargó del guion. Un videojuego de género western que, como en 'Marbella Vice', se limitaba a ofrecer una experiencia de juego limitada donde el jugador solo tenía que disparar a los villanos de turno. Tuvo su versión para PC, que se vendió en quioscos. 'Marbella Vice' no tuvo esa suerte.

'Marbella Vice' contó con un presupuesto mayor y la participación de lo que luego serían dos grandes del cine español, el ya desaparecido Álex Angulo y el actor y director Santiago Segura. Su interpretación, desmesurada y facciosa, bien pudo ser el origen del repugnante y celebrado Torrente. En el videojuego, su personaje es al menos tan atrabiliario como el que interpreta Jaime de Mora y Aragón, que se prestó al despiporre con su encuerado cameo. Ya pocos recuerdan en el municipio el trasunto de su producción, pero están todos los 'gimmicks' de la época: colores flúor, macarrismo galopante y un fondo sociológico acertado y, por qué no, un tanto vergonzante treinta años después.

¿Cuál es el problema?: El tiempo. 'Marbella Vice' nunca fue un buen videojuego. En aras del realismo, se sacrificó la jugabilidad. Este error fue frecuente en un momento en que los videojuegos empezaban a transicionar hacia los gráficos en 3D.

No fue el primer videojuego desarrollado en Full Motion Video, como se decía entonces. El exanimador de Disney, Don Bluth, fue el primero en desarrollar un experiencia que era más una película interactiva que un videojuego en 'Dragon´s Lair'. En favor de Álex de la Iglesia, cabe destacar que supo entender el medio en el que estaba trabajando. Los planos que rodó atienden a esa jugabilidad escasa -que no permitía el control total del avatar-, pero que facilitaron cierto gozo. El precio de cada partida era de 100 pesetas, en un momento en que lo habitual eran 25 en las maquinitas de la época.

Todo esto es historia. Óscar Nájera, unos de los factótum de surecuperación, revela que el hardware de la máquina arcade es cien por cien española. Sus tripas contenían una placa de Amiga 500, un computador de alta gama al que se le añadió un lector de laserdisc.

Los vídeos están en la Red. Contó con la participación de gente que hoy es principal en el cine nacional. No lo hicieron mal, pero la Edad de Oro del Software español ya había terminado para entonces. Dinamic, el estudio de desarrollo que lo petó en España en los años ochenta, pasó a desarrollar PC Fútbol. España perdió el pie por falta de apoyo institucional y financiero. Esta es solo una parte de su historia.

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