La Junta mantiene el cierre de bares y comercios a las 18 horas en Marbella, Estepona y otros 35 municipios

Marbella, Estepona y otros 35 municipios, pertenecientes a los distritos sanitarios de la Serranía y la Costa del Sol, mantendrán su actual horario de cierre en bares y comercios, a las 18.00 horas. El resto de la provincia, incluida la capital, ya en el nivel 2 de riesgo, puede abrir sus establecimientos hasta las 21.30 horas desde hace una semana, una ampliación horaria que continuará durante otros siete días. El comité de alertas de salud pública actualizó ayer, como cada jueves, los niveles de riesgo de todos los municipios de Andalucía en función de diferentes parámetros, como la incidencia acumulada, la presión hospitalaria y la tasa de contagios entre mayores de 65 años, el principal grupo de riesgo de esta pandemia de coronavirus.

El comercio y la hostelería tendrán que seguir bajando la persiana a las 18.00 horas en Marbella, Estepona, Benalmádena, Torremolinos, Fuengirola, Mijas, Manilva, Ojén, Istán, Casares, Benahavís, Ronda, Serrato, Pujerra, Parauta, Montejaque, Montecorto, Júzcar, Jubrique, Jimera de Líbar, Igualeja, Genalguacil, Gaucín, Faraján, Cuevas del Becerro, Cortes de la Frontera, Cartajima, El Burgo, Benarrabá, Benaoján, Benalauría, Benadalid, Atajate, Arriate, Alpandeire, Algatocín y Árchez. La Costa del Sol se mantiene en el grado 1 del nivel 3, el estado anterior al nivel 2, que permite abrir hasta las 21.30 horas. Pero la Junta analiza los datos por distritos sanitarios. Por eso entre los municipios del distrito Costa del Sol no se encuentra Málaga capital, que tiene un distrito propio al que también pertenece Rincón de la Victoria.

Las localidades de la Serranía pasan al grado 1 del nivel 3, salvo Gaucín y Montejaque, en nivel 4 por el alto número de contagios. La Axarquía sigue en nivel 2, salvo Árchez, declarado en nivel 4. Los distritos de Málaga, Guadalhorce y La Vega continúan en nivel 2. El comité de alertas no vuelve a reunirse hasta el próximo jueves, de modo que las medidas tienen una vigencia mínima de una semana. Será entonces, el 18 de marzo, cuando la Junta decida si aligera las restricciones en la Costa del Sol, la Serranía y el resto de la provincia que aún no ha bajado al nivel 2. También puede darse el caso contrario; que, por un aumento de casos o del porcentaje de camas hospitalarias ocupadas, una localidad en riesgo 2 suba de nivel y sus establecimientos tengan que cerrar de nuevo a las 18.00 horas.

La actualización de los niveles de riesgo se publicó anoche en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) y resulta efectiva ya desde este viernes. Siguen intactas el resto de medidas aplicadas por la crisis sanitaria: el toque de queda entre las diez de la noche y las seis de la mañana, el cierre perimetral de las provincias y la comunidad autónoma y la limitación de reuniones dentro y fuera de casa a un máximo de seis personas, cuatro si es en el interior de los establecimientos.

Sólo tres municipios de la provincia presentan una tasa superior a los 500 contagios por cada cien mil habitantes en los últimos catorce días: Gaucín, Montejaque y Árchez. La Junta decreta su cierre perimetral. Ninguna localidad registra una tasa de más de mil casos, el límite fijado por el Gobierno autonómico para ordenar el cierre de toda actividad no esencial.

La actualización de los niveles de riesgo cayó como un jarro de agua fría en la Costa del Sol, que esperaba bajar de nivel y poder así abrir sus negocios hasta las 21.30 horas. Así lo había vaticinado días antes el consejero de Presidencia de la Junta, Elías Bendodo, que reconoció que era probable que el comité de alertas declarase el nivel 2 en el distrito. Pero las expectativas no se han cumplido. Las patronales de Mijas, Fuengirola, Torremolinos y Benalmádena se han unido para rechazar los criterios de restricciones de la Junta. Algunos municipios, como Torremolinos, deslizan incluso posibles razones políticas tras la negativa del Gobierno andaluz a evaluar el estado de la pandemia por municipios, como hasta hace una semana, y no por distritos sanitarios, como ahora. Su caso resulta especialmente llamativo porque se trata del único gran municipio de la provincia que presenta una tasa por debajo de los 50 contagios por cada cien mil habitantes, considerado el nivel de riesgo más bajo. Pero desde la Junta insisten en que se aplican otros criterios, no sólo la incidencia acumulada.

Ayer se evidenció el frenazo en la bajada de contagios detectado desde hace días. La provincia de Málaga presentaba una tasa de 100 casos por cada cien mil habitantes, incidencia idéntica a la registrada el día anterior. Este parón en la desescalada de contagios se produce después de varias semanas de descensos en la curva de diagnósticos positivos.