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JOAQUINA DUEÑAS
Marbella
Lunes, 3 de octubre 2022, 00:27
Hicham El Hafed tiene 25 años y llegó a San Pedro Alcántara en coma en el año 2006 desde Marruecos con visado humanitario gracias a la ayuda de Cruz Roja. «Me ingresaron el Hospital Materno Infantil de Málaga, donde estuve tres meses y me diagnosticaron ... agammaglobulinemia, conocida como enfermedad de Bruton, y ya me dejaron en España». Se trata de una dolencia que le hace mucho más propenso a contraer infecciones por lo que cae enfermo de manera recurrente y requiere de tratamiento crónico. Eso hizo muy complicada su etapa educativa, sin embargo, no le ha frenado a la hora de emprender y de liderar una startup de inteligencia artificial que acaba de ver la luz.
A él y a su madre, cocinera de profesión, les costó mucho empezar de cero pero ahora, esas adversidades le han enseñado a salir adelante y aunque nunca ha podido ir a clase como un alumno más, es el director del proyecto Procys para el que reivindica su origen marbellero y malagueño.
«Procys se dedica a automatizar procesos manuales. Donde haya una tarea rutinaria, será la inteligencia artificial la que se encargará. Por ejemplo, anotar a mano facturas de proveedores: coger una factura, escanearla, leer el PDF y sacar el total», explica. Hace unas semanas salió al mercado para poder usar el servicio y que se ha estado desarrollando prácticamente un año desde Marbella.
Hicham estudió en escuela publica pero «mi formación fue muy básica porque faltaba mucho a clase por enfermedad recurrente», así que estuvo hasta los 16 años, dejó la ESO. «Por entonces, ya trabajaba haciendo webs para empresas a través de internet». «Dejé la escuela obligatoria y empecé a trabajar por mi cuenta», explica Hicham Estuvo haciendo ciberseguridad y soporte técnico administrativo de sistemas en una compañía y luego a los 18 intentó retomar la ESO para adultos, «pero me di cuenta que estudiar no era lo mío», reconoce, así que casi toda su formación en programación ha sido autodidacta.
Ahora lleva tres años teletrabajando en la compañía holandesa Open Provider que le ha dado la oportunidad de liderar esta startup. «La idea surge porque tenemos más de 2.400 proveedores. Con solo dos facturas por proveedor ya es una locura para el departamento, así que desarrollamos esta inteligencia entrenada por expertos en contabilidad», relata.
«Le das una factura y se encarga de extraer toda la información de forma estructurada, sin que tenga que intervenir un ser humano y tarda menos de 15 segundos por factura», detalla.
Comenzaron a desarrollarlo dentro del equipo de Open Provider, pero al ver que tenía potencial, montaron una startup, de la que Hicham es el director. Este mes abrirán su oficina en Málaga y el equipo es de la provincia, formado por unas trece personas, con el apoyo del grupo de la compañía principal que también es el inversor único, aunque barajan abrir una ronda de financiación.
El producto vale para cualquier tipo de compañía que tenga más de una decena de facturas. «Hemos empezado con la automatización de facturas pero se puede es tener a otros procesos como etiquetas de envíos tanto de paquetería como de containers, pólizas de seguros o pasaportes. Se puede extraer cualquier dato de cualquier ficha de forma automatizada», termina.
Hicham quiere poner en valor la tan conocida frase de que «en la vida, todo tiene solución menos la muerte». Por eso, quiere enviar un mensaje a los jóvenes de su generación: «Que no se rindan». «Cada vez escucho a más personas de mi entorno que están hartos de trabajos precarios o ven muy negro el futuro, no creen que puedan trabajar después de terminar sus estudios universitarios», asegura. Para él, «se trata de reinventarse y no rendirse», porque «siempre hay un camino», anima.
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