Una cárcel con graves deficiencias aloja al exedil de Marbella

La cárcel, perteneciente al Servicio Penitenciario Provincial de San Juan, tiene capacidad para poco más de 1.100 reclusos y según un informe elaborado el año pasado por la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin), un organismo oficial del gobierno argentino, no cumple con las mínimas condiciones de higiene y viola algunos principios básicos del ya precario sistema penitenciario del país sudamericano.

El informe fue realizado mediante visitas sorpresivas a las diferentes cárceles, donde se tomaron fotografías cuya difusión causó impacto en la sociedad argentina.

Una norma de Naciones Unidas denominada Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos y conocida como ‘Reglas Mandela’ establece las condiciones que deben cumplir las prisiones. El informe indica que en la prisión de Chimbas muchos pabellones presentan estados que no cumplen con las reglas mínimas. La Regla 21 indica que «todo recluso dispondrá, de conformidad con los usos locales o nacionales, de una cama individual y de ropa de cama individual suficiente, entregada limpia, mantenida convenientemente y mudada con regularidad a fin de asegurar su limpieza» . Las fotos muestran que en Chimbas las camas son muy precarias, con estructuras duras y con evidente suciedad.

Otra regla que viola la unidad de Chimbas es la 13 que señala que «los dormitorios, deberán cumplir todas las normas de higiene”. En una de las fotos difundidas por el Procuvin se ve un baño en mal estado también con pésimas condiciones de higiene.