Bienestar en alta mar: paseos en barco por la Costa del Sol con masaje incluido

El verano en la Costa del Sol ofrece planes de todo tipo. Uno de ellos es pasear en barco por las aguas malagueñas. Para darle mayor exclusividad, las empresas de la zona buscan ofrecer servicios personalizados, como es el caso de Renova Thermal, una firma con sede en Marbella que ofrece masajes a bordo en los recintos náuticos de Puerto Banús, Málaga, Estepona, Benalmádena y Marbella. «Esta actividad la realizamos desde hace nueve años en los meses de verano, es el plan estrella», explica Lucía Romero, responsable de la firma.

Esta experiencia, denominada 'bienestar en alta mar', incluye un paseo en barco durante dos o tres horas. «Todo va a gusto del cliente. Lo mínimo son dos horas de viaje, pero existe la posibilidad de que sean tres o cuatro horas si el usuario lo desea», indica Romero, que además es una de las masajistas acompañantes en estos paseos.

Este servicio ofrece diferentes puntos de salida pactados con los capitanes, en los que se alquila una embarcación, cuyo tipo dependerá del puerto en el que se embarque. Concretamente, en Málaga es un yate con capacidad para 8 personas, en Puerto Banús y Estepona un velero para 8 y 16 personas, respectivamente, y en Benalmádena, un catamarán para 18 personas.

La duración de los masajes en estos paseos por alta mar dependerá del número de personas que acudan: unos 7 minutos en el caso de que el barco esté completo. Asimismo, el pack incluye un catering compuesto por fruta, snacks, cava o refrescos, según explica Romero.

Las tarifas son las mismas en todos los casos, solo dependerá de cuántas personas acudan a la cita. El precio de un paseo de dos horas es de 600 euros, con una capacidad de hasta ocho personas. En el caso de Benalmádena, el paseo de dos horas para 16 personas asciende a 1.200 euros. «El precio mínimo por persona es de 75 euros», señala Romero, que asegura que también existe un paseo 'especial parejas' pensado para una experiencia más romántica. «Incluye masajes a cuatro manos, champán o picoteo más selecto, para que sea una experiencia inolvidable».

En este sentido, la masajista asegura que muchos de los clientes aprovechan la experiencia para celebrar eventos. «Lo que más tenemos es despedidas de soltera y cumpleaños, pero también recibimos a parejas que celebran su aniversario de bodas, o pedidas de mano», explica.

También organizan fiestas temáticas durante el paseo. «Puedes traer tu música si quieres. Hemos tenido grupos donde todos iban de blanco, de marineros o de actrices de Hollywood, entre otros», cuenta Romero.

Al acudir como masajista, la responsable de Renova Thermal asegura que se siente parte de las experiencias, de las que guarda recuerdos muy significativos. «Es muy chulo poder sentirte cómplice de esas historias de parejas y amigos que vienen a disfrutar de un día especial».

Los masajes que se ofrecen en la jornada son relajantes, según explica Romero. «Hay que tener en cuenta que es un espacio reducido y una duración menor, por eso damos a elegir la zona en la que lo desean, puede ser cervicales, cabeza y cara, espalda, pies o piernas. Es un masaje mecido por las olas, a veces te salpica el agua y es muy agradable».

Asimismo, también se da la opción de contratar un servicio añadido para el día en alta mar: reportajes de fotos y vídeos. «Los clientes quieren recordar este día, mientras se hacen masajes o saltan del barco para nadar. Es un paseo en mitad del mar, que le da un valor añadido», cuenta Romero.

En cuanto a las medidas de seguridad necesarias por el Covid-19, la responsable asegura que todos los empleados a bordo cuentan con mascarilla y gel hidroalcohólico. «Es algo que siempre se ha hecho en los gabinetes de estética, las mascarillas han formado parte de nuestro trabajo».

Por otra parte, Romero explica que ha iniciado un nuevo proyecto relacionado con el mundo de los masajes: clases 'on line', en los que realiza una grabación profesional de todos los masajes tradicionales para sus quince alumnos, muchos de ellos de México. «Luego, ellos graban un vídeo practicando el masaje para que yo les pueda corregir las manos», indica la masajista, que asegura que es una experiencia «súper motivadora» dadas las circunstancias actuales