Mago de Oz estuvo en el Weekend Beach.

Ojeando y Weekend Beach, hasta 2015

Los dos festivales despiden un buen fin de semana y ya piensan en la siguiente edición

i. bELLIDO/b. áLVAREZ/ r. sOTORRÍO

Lunes, 7 de julio 2014, 09:25

No había acabado la primera edición cuando la organización ya estaba pensando en la segunda. Al Ayuntamiento de Vélez-Málaga le bastó la primera noche de conciertos para dar luz verde a una continuación. Las expectativas se han cumplido, pues se ha superado la cifra de 15.000 asistentes. «Queremos que el festival se asiente como una cita fija, pues no hay otro igual en Andalucía», afirma Enka Tripiana, del departamento de prensa del festival.

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Weekend Beach

  • 15.000 era la cifra de abonos que la organización esperaba vender. Se han superado las expectativas, gracias a la venta de entradas por día.

  • 400 personas han trabajado en el festival, entre personal, organización, empresas subcontratadas...

Mägo de Oz fue el grupo que más contribuyó a que la cantidad de público fuese más equilibrada entre los dos escenarios principales. Zeta, la nueva voz de la banda de folk-metal desde 2012, mantiene viva la esencia del grupo. La flauta y el violín potenciaron el lado folk de la banda e hicieron saltar al público. Así, sonaron en un principio 'H2Oz', 'Satanael', dejando para el final las míticas 'Fiesta pagana' y 'La costa del silencio'.

'Paisajes' fue la canción con la que El Puchero del Hortelano comenzó a tocar. El grupo de Granada combinó canciones de su último disco con otras más antiguas de su amplia discografía (cuentan ya con siete discos). La trompeta siempre cobra protagonismo en sus directos. 'Tú eres eso' puso el toque romántico al concierto. 'Pelusas', 'Ser humano' y 'Hay días' fueron otros de los temas, pero se despidieron con el más popular de todos: 'Asuntos serios'.

La mezcla de reggae, rock, funk, soul y otros estilos, sumada a la fuerza en escena que posee Tony Moreno (también cantante de Tabletom), hizo que miles de personas fueran a escuchar a Eskorzo. No estaría tan mal fue de las más coreadas. En 'Pinta la pared' (canción dedicada a Andalucía y a sus jornaleros), una bandera verdiblanca se alzó entre los 'weekers'. 'El tío del saco' y 'Clavelitos' iban con dedicatoria incluida: la primera, a los alcaldes, y la segunda, a los tunos.

Pendulum fue la gran estrella internacional de música electrónica. La inclusión de 'dubstep' y 'trap' atrajo a los aficionados de estos géneros a altas horas de la madrugada.

Ojeando

Nadie puede contenerse ante el grito de «¡a quién le importa lo que yo haga!». Ni el barbudo con gafas de pasta, ni el chico excéntrico con flequillo, ni la joven del vestido chic. Alaska llegó, actuó y triunfó en el pueblo más indie de Málaga. Unas 2.300 personas, el aforo del escenario Patio del Ojeando, movieron la tibia y el peroné al ritmo de 'Dramas y comedias', de 'Absolutamente' -con un «viva Sara Montiel» incluido- y de clásicos de Dinarama como 'Perlas ensangrentadas' o 'Mil campanas'. Un poco de todo, algo que aprendió de los Pet Shop Boys, como contó a la prensa antes de la actuación.Al acabar confesaría: «Me lo he pasado bomba».

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Ojeando

  • 2.300 abonos vendió el festival de la Sierra de las Nieves para su escenario principal, el único de pago. Por tercer año consecutivo, se logró el sold out.

  • 7 por esa cifra se multiplicó la caja de algunos bares y cafeterías de Ojén durante el fin de semana.

Fangoria llevó a Ojén su 'show' completo, con una puesta en escena y un juego de luces inusual en estos lares. Cada canción tenía una coreografía propia que ejecutaban cuatro sensuales bailarines enfundados en mallas de todos los colores. Era un espectáculo al más puro estilo Alaska. Y lo era tanto si cantaba en directo como si no, como algunos cuestionaron: el público se volvía loco solo con verla. La querían a ella y también a Mario Vaquerizo, a quien muchos buscaban entre bambalinas, pero ni rastro. El poder de la televisión. Alaska, no obstante, negó a los periodistas sentirse expuesta por mostrar su vida. «¿Tú tienes Facebook?, ¿y eso no te da pudor? Seguro que si lo miro sé lo que has desayunado. Esto lo controlas tú, no es todo inocente», replicó.

Fangoria fue la actuación central de la noche más electrónica en Ojeando. Desde Copa Turbo, los ganadores del certamen Nuevos Talentos, hasta Mendetz, que logró mantener al público bien despierto pasadas las tres de la mañana con descargas propias y guiños, por ejemplo, a Gala. Antes, Grises hizo retumbar el patio del colegio y contagió a Ojén con el baile de la enérgica Amancay Gaztañaga. La Habitación Roja se salió de la norma electrónica y demostró oficio en un directo sustentado en su repertorio más reciente. Mucho han cambiado las cosas desde que ellos inauguraron el Ojeando aquel 2008: ayer se logró el tercer 'sold out' consecutivo. Con competencia directa en la agenda, Ojén también resiste.

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