La cata: los vinos destacados de la tercera semana de junio

Es un auténtico vino de coleccionistas, ya que se elaboran muy pocas botellas y solo en añadas muy buenas. Es un vino de parcela y actualmente el más exclusivo de esta bodega riojana. El vino ha tenido una crianza que ronda los 17 meses en barricas nuevas de roble francés y después se ha estabilizado con el paso de los años en botella. Color rojo rubí muy limpio y brillante. En nariz se aprecian notas a balsámicos, menta y un final a tabaco de pipa muy persistente. Muy redondo y elegante en boca. 

Estamos ante un rosado muy exhuberante y aromático. Esta bodega revolucionó los vinos extremeños y en añadas anteriores han elaborado rosados más suaves en boca que el de esta añada. Hay que reconocer que han hecho un coupage muy medido y meditado de variedades como la garnacha tinta, syrah y cinsault. Tiene una crianza de 5 meses sobre sus propias lías. Color piel de cebolla pálido. Recuerdos en nariz a frutas como la frambuesa. En boca es un vino fresco, sedoso y con persistencia.

uve ocasión de catar por vez primera este ribeiro con el padre de la criatura, Carlos Moro, propietario de Bodegas Matarromera y que recientemente ha inaugurado otra bodega en esta D.O. gallega. El salto de la Ribera del Duero a Galicia es muy significativo, ya que Matarromera también elabora en la D.O. Rías Baixas. Este Ribeiro se sale de lo habitual, es un coupage de variedades como la torrontés, treixadura, godello y albariño. Un conjunto de variedades que aportan muchos matices personales a este blanco. Su crianza sobre sus propias lías le hace maridar muy bien con el marisco. 

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