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Con sus poco más de 180.000 habitantes, Reims, al nordeste de Francia, es conocida mundialmente como la capital del champán, y aunque la cercana Epernay se reparta con ella las sedes de las casas más reconocidas y kilómetros de subsuelo dedicados a cavas de ... crianza, no está en condiciones de discutirle el liderazgo histórico y patrimonial, teniendo Reims en su haber monumentos como la Catedral de Notre-Dame, una de las obras cumbres del gótico francés, el Palacio Arzobispal de Tau o la preciosa Basílica de Saint Remy. También gana, por diez kilómetros, en extensión de galerías subterráneas (crayères) para la crianza del champán, 120 kilómetros en Reims frente a los 110 de Epernay. Algunas de las casas más grandes y afamadas se localizan en las laderas de la colina de Saint-Nicaise. Todas están abiertas a la visita: la espectacular Maison Ruinart; Taittinger, que almacena más de 15 millones de botellas; Vranken-Pommery, con su ostentoso castillo y sus verdes jardines, o la famosísima GH Mumm, que incluye un museo dedicado a la elaboración del champán con maquinaria histórica. Eso sí, si de verdad se desea hacer una inmersión en la historia, merece la pena recorrer los 31 kilómetros que separan la ciudad de la aldea de Hautvillers, en cuya abadía el monje benedictino Pierre Perignon, Dom Perignon, desarrolló el método champenoise. La abadía es hoy propiedad de la casa Möet & Chandon, que elabora allí el champán Dom Perignon, pero la iglesia y la tumba del monje son visitables, y en el pueblo hay otras 20 casas de chamán de viticultores independientes. Otros hitos gastronómicos de Reims son los famosos bizcochos rosa, y mucho mejor aún, sus mostazas y vinagres a base de champán.
Taittinger (www.taittinger.com) es visita obligada. Sus galerías subterráneas de caliza custodian el tesoro de uno de los champanes más afamados del mundo. GH Mumm (www.mumm.com) es interesante por sus caldos y por su museo. Ruinart (www.ruinart.com), la casa más veterana con 270 años de historia, es un espectáculo por la grandeza de sus cavas, y Vranken-Pommery es pura ostentación (tickets en http://pommery.tickeasy.com/). Para una experiencia distinta, Caillez-Lemarie (www.champagne-caillez-lemaire.com/), en Damery, a 5 km de Hautvillers, es el pequeño productor familiar más premiado este año en Francia. Otra historia.
Las galletas rosa (biscuits roses) son un hito gastronómico de Reims. Inventadas en el año 1691 por un panadero de la localidad, deben su color rosa al carmín utilizado para disimular los puntos negros de la vainilla. La casa Fossier (www.fossier.fr/) es hoy el referente absoluto en este dulce, con el que se elaboran muchos otros subproductos, incluyendo polvos para decoración, chocolates y cremas untables. Pero lo cierto es que aunque la galleta rosa es la estrella, Fossier tiene dulces más interesantes, como interesantes son las visitas guiadas que ofrecen para conocer su obrador y la historia.
Puede que los eclipse la fama del champán y las galletas rosa, pero en Reims se elabora una excelente mostaza y un vinagre tradicional a base de champán. La casa Clovis (https://moutarde-clovis.com/) es el referente. Un sabroso surtido que hay que probar.
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