La Pechá: una vermutería para comerse Málaga en formato tapa

Con una cuidada estética de taberna tradicional, el establecimiento propone un picoteo desenfadado en buen ambiente, perfecto para empezar o terminar un plan. Asimismo, conscientes del auge que está teniendo esta bebida, La Pechá ha ido incoporando una selección de vermús tanto locales como nacionales e internacionales hasta alcanzar las casi 30 referencias. En este catálogo también se incluye uno de semielaboración propia, ya que emplean como base un vermú de Bodegas Dimobe y lo infusionan ellos mismos con ajo negro, creación que se ha convertido en una de las favoritas de los clientes.

En lo referente a la carta, el establecimiento cuenta con una selección de tapas entre las que se encuentran, además de las mencionadas, propuestas como la ensaladilla rusa con mayonesa de huevo frito, el bocadito de pollo cajún, el morcibao o las tablas de quesos y embutidos que combinan lo nuestro con sabores de otros lugares.

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Además, van renovando la minuta cada seis meses incorporando novedades y recuperando platos populares que ya han pasado por su barra. «Nuestro objetivo es ofrecer un picoteo casero sencillo, pero de calidad. El local tiene 37 metros cuadrados y obviamente tenemos una cocina limitada, pero la prioridad es que lo que hagamos, lo hagamos muy bien», asegura Nieto. Y debe ser así porque en sus poco más de dos años de andadura (abrieron justo después del confinamiento) han logrado reunir a una legión de parroquianos que les confían algunos de sus mejores momentos. «Tenemos muchísimos clientes habituales. Gente que tiene La Pechá como su lugar de encuentro, que nos dan su opinión y nos ayudan a mejorar. Es una relación muy bonita y cercana», afirma el responsable.

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En su afán de seguir mejorando, la vermutería está preparando novedades que, aseguran, presentarán a lo largo del año. Estaremos tela de atentos.