El Pimpi lleva sus barriles y su esencia a Marbella

Aunque fiel a su esencia, la nueva bodega se presenta mucho más chic que la original, con una pequeña zona de barra para tapeo (de momento sólo durante unas horas al día) y una amplia oferta gastronómica. El negocio se ha instalado en la zona más andaluza de todo el complejo.

La presentación en sociedad del nuevo establecimiento, que abrirá oficialmente este viernes, se ha realizado a ritmo de flamenco y ha contado con la presencia del actor malagueño y socio de la bodega, Antonio Banderas, que ha estado acompañado de sus otros dos compañeros de viaje: Elena Cobos y Pablo Gonzalo. El propio Banderas ha sido el encargado de estrenar los barriles en forma de autógrafo para desear suerte al nuevo local.

Durante la puesta de largo del nuevo establecimiento hostelero, sus protagonistas han confirmado que surge del amor mutuo e incondicional de El Pimpi y Puente Romano por Andalucía: por sus tradiciones, por sus maravillosas personas y por todo aquello que suma a que esta región sea un lugar único y con mucho arte en el mundo. Por otro -han añadido- del deseo común de promover la extraordinaria riqueza de esta tierra y de darla a conocer al mayor número de personas posible.

A nivel gastronómico, la oferta del nuevo local será similar a la que se ofrece en Málaga. El Pimpi Marbella ofrecerá producto, servicio y solera a la altura de su hermano mayor. «Ese listón será el punto de partida para que sus clientes experimenten el sabor y la historia de Málaga con el mejor sello que existe en un entorno único», resumen.

En su carta podrán encontrarse clásicos como gambas al Pim-pi (24 euros), berenjenas fritas con miel (15 euros) o surtido de quesos andaluces (30 euros) platos del mar como boquerones fritos o cazón en adobo (18 euros cada uno) o carnes. Los más sibaritas tendrán a su alcance latas de caviar ecológico de Riofrío (150 euros).

Durante la presentación, Banderas ha recordado su historia de amor con El Pimpi desde que fue por primera vez con 9 años hasta la actualidad. «A mi primera novia la llevaba a cenar a El Pimpi; allí rodé una película, El Camino de los Ingleses, y vivo prácticamente encima». Una historia personal que ha vinculado también con Marbella, ciudad a la que ama porque allí nació su hija. Tanto es así que en su obligada firma en el barril ha puesto: «El Pimpi Marbella. En Marbella nació mi hija Stella y ahora nace este Pimpi 2.0. Satisfacción plena».

En esta relación de amor ha asegurado que El Pimpi no ha elegido Puente Romano, sino que ha sido al revés, ya que los responsables del complejo son muy exigentes a la hora de escoger a sus acompañantes. «Aquí se concentran un montón de los mejores restaurantes del mundo, pero una de las cosas que le faltaba era la comida española y andaluza», ha resumido.

En referencia a la llegada a Marbella, Elena Cobos ha confesado que el destino les ha llevado fuera de su registro natural que es Málaga. «Todos estamos en constante cambio porque la vida es imparable; por eso aprovechamos esta oportunidad que nos ofrece el destino para proyectar nuestro Pimpi fuera».

Hablando de este nuevo idilio malagueño-marbellí, Daniel Shamoon, codirector de Puente Romano, ha reconocido que llevan muchos años haciendo cosas nuevas, trayendo marcas internacionales hasta Marbella, pero que les faltaba el palpitar del corazón del pueblo andaluz. Y para lograr todo eso El Pimpi «es perfecto». Haciendo un símil, ha confesado que ambos establecimientos son prácticamente iguales porque tienen la misma esencia. «Para mi ha sido la mejor decisión de todas; traer el corazón andaluz a Puente Romano».

En el acto de presentación también ha participado la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, quien ha considerado que lugares como éste van a lograr una mayor fidelización de las personas que visitan el complejo hotelero. «Si hay algo que le faltaba a Puente Romano era ese alma que transmite El Pimpi; un lugar con una materia prima única de kilómetro cero».

Bodegas El Pimpi es un referente de la ciudad desde que abrió sus puertas en agosto de 1971. Más de medio siglo después, el proyecto empresarial que iniciaron los empresarios y amigos Francisco Campos y Pepe Cobos da empleo a más de 200 personas.