La Jábega (Torremolinos): Cocina marinera de mercado

Un buen producto y un dominio preciso del fuego marcan la diferencia en esta zona

Enrique Bellver

Sábado, 5 de abril 2025, 02:00

La Jábega es uno de los chiringuitos, mejor dicho, restaurantes al borde del mar, que más tiempo llevan abiertos en la playa de El Saltillo ... en La Carihuela, para ser más concreto, cuarenta años. Fernándo Márquez lleva 35 años dirigiendo el negocio, siendo su hijo Fernando quien le acompaña en la actualidad y forma parte de esa segunda generación al frente del establecimiento. Su cocina de mercado se caracteriza por tener una pequeña parte de influencia cántabra, pues su suegro era vasco y asentador de pescado en el puerto de Pasajes (Guipúzcoa), de ahí que en su carta aparezcan algunas especialidades relacionadas con la manera de preparar los pescados en las brasas al estilo de como se viene haciendo en todo el norte, siendo un ejemplo el rodaballo espetado y acabado a la brasa.

Con el devenir y paso de los años, incluida la última reforma llevada a cabo el pasado año, La Jábega se ha convertido en un restaurante de playa en el sentido más literal de la palabra, es decir, mesas perfectamente montadas, incluso con sus manteles de tela; un expositor de vinos climatizado y una cocina en consonancia con lo que el comensal espera cuando acude a un espacio de estas características. La relación calidad-precio de toda su oferta culinaria es muy buena, máxime si tenemos en cuenta el producto que Fernando se encarga de adquirir y el precio que hay que pagar en lonja por todo tipo de pescados y mariscos de gama alta.

La Jábega debe su nombre tanto a las embarcaciones que se usaban para la pesca de sardinas, boquerones y jureles en nuestro litoral, como al arte de red de cerco que se hace desde la orilla misma de la playa. Aunque en la actualidad las jábegas están prohibidas para la pesca, esta casa mantiene su nombre y destaca entre sus especialidades por su forma de espetar o freír el pescado. Particularmente me quedo con la fritura más que con los espetos. Buen aceite, buen producto y temperatura justa a la hora de freír. Los arroces mantienen una línea de regularidad aceptable, aunque no son a tenor del que probé la especialidad principal de esta casa. En cambio, el marisco de concha, en especial la concha fina y los bolos junto con las gambas a la plancha sí que merecen todo tipo de alabanzas por su tamaño, sabor y calidad. La carta de vinos se encuentra entre las más recomendables de toda la zona por su diversidad.

Algunas propuestas

Fritura variada. La Jábega no sería lo que es a día de hoy si no tuviera en su carta una fritura malagueña como la que tiene. Secretos pocos, una selección en cuanto a frescura y calidad de los pescados y la utilización de un buen aceite a su temperatura.

Arroz caldoso de pescado y marisco. El fondo utilizado para cocer el arroz lo dice todo. Un caldoso donde la fuerza sápida de los mejillones y el pescado de roca aparece en cada grano. Una especialidad que invita a repetir cucharada tras cucharada.

Conchas malagueñas. Cuando el género importa y mucho, nada mejor para abrir boca que una selección de conchas malagueñas donde la concha fina es la reina por su tamaño y frescura junto con unos bolos igualmente frescos y tersos en cuanto a textura.

Rodaballo a la brasa. Los pescados en espeto y terminados al estilo del norte son otra especialidad de La Jábega, aunque en esta ocasión el roballo llega con un punto de exceso de fuego, lo que realmente le restaba jugosidad ytambién parte de su sabor.