La megafuente de patatas fritas de Los Patos

Es lo que ocurre en Los Patos, una venta de toda la vida situada en la carretera de El Torcal y en la que se para el tiempo (literalmente, porque no hay cobertura). Allí, las patatas fritas van por libre. Tienen su entidad propia como plato. No se sirven como acompañamiento. De ahí el éxito de la megafuente. Ya que se piden, mejor a lo grande. Aseguramos que no se van a cansar. Sobre todo si van en grupo (recomendable para compartir entre cuatro o más). Son un vicio. Más aún si se complementan con unos huevos fritos (también como plato aparte).

En realidad, cualquiera de sus elaboraciones son para repetir. Saben a cocina casera, de la de verdad. Entre sus especialidades, destacan también el conejo al ajillo, la pelona de lomo, el flamenquín, las migas o el lomo con tomate. Eso sí, vayan con paciencia. Es de esos rincones a los que hay que ir sin prisa. De hecho, ellos mismos lo avisan en sus paredes: «Cuando el local está lleno se tarda 1,30 minutos».