Borrar
Apostando por la cocina. Álvaro Ávila es un cocinero con técnica, talento y conocimiento, que siempre juega al límite en sabor y riesgo. En esta nueva etapa, apuesta por bocados individuales, muchos de los cuales, por concepto y elaboración, son platos de alta cocina. DAniel Maldonado
Álvaro Ávila, la madurez de un cocinero libre

Álvaro Ávila, la madurez de un cocinero libre

A punto de cumplir 10 años, La Alvaroteca prescinde del show de la sala para centrarse en una cocina original, elaborada y sabrosa presentada en forma de tapas individuales

Sábado, 30 de abril 2022, 00:57

El local de La Alvaroteca contradice varios de los consejos que cualquier persona entendida daría a quien quisiera abrir un restaurante en Málaga. No está en un entorno atractivo, sino en ese caleidoscopio de micromundos sin maquillaje que componen los barrios malagueños. Tampoco tiene terraza ... ni posibilidad de tenerla, porque la calle Gerona es una vía esencial para el tráfico entre Los Tilos y la Cruz del Humilladero y las aceras dan lo justo para que los peatones circulen. Pero la casa de Álvaro Ávila está a punto de cumplir una década desafiando cualquier cosa que se pudiera dar por sentada, y el secreto es una cocina personal, llena de sabor, técnica y riesgo. Alta cocina de barrio, canalla, apasionada, insolente y asequible, que, si en otro tiempo quedaba relegada a un segundo plano frente a una puesta en escena estridente (esposas, transfusiones de cócteles, camisas de fuerza y ambientación abiertamente friki), en el último año ha conquistado el protagonismo junto a una carta de vinos brillante y, como todo aquí, poco o nada previsible.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariosur Álvaro Ávila, la madurez de un cocinero libre