Las razones de las cuatro revisiones de VAR contra el Málaga ante el Eldense

La jugada del gol de Galilea pudo haber sido anulada por doble motivo, pero entra en vigor lo primero que sucedió cronológicamente. Dani Sánchez (que asistió en dos goles y pudo hacerlo en cinco en el partido, de no invalidarse acciones) ejecuta un córner, pero la trayectoria con efecto del balón lo lleva a salir del campo por la línea de fondo antes de llegar al área rival. Esto es lo que causa la anulación. Además, Galilea incurre en una posible falta a Martos cuando remata, pero esto no llega a analizarse, aunque podría haber sido un motivo ulterior de suspensión, de no haberse dado esa 'comba' del balón en el centro. En todo caso, es la única de las cuatro jugadas sobre las que la RFEF no publicó los audios del VAR.

En el minuto 44 se dio la acción más compleja. Antoñito fue derribado por Fran Gámez en la frontal del área y el defensa vio la amarilla. Antes de ejecutarse la falta Sánchez López es llamado por la sala VOR. González Francés le advierte de una posible roja directa, no amarilla, al ser ocasión manifiesta de gol.

Antoñito encara en diagonal la portería y los centrales Piña y Martos llegan en carrera ligeramente más retrasados. También se podía dudar desde la grada por un posible penalti, pero la infracción es por poco fuera del área. «Para que valores un posible Dogso», le dice el árbitro de VAR al principal.

¿Con qué se refieren a 'Dogso'? En la jerga arbitral alude al acrónimo en inglés de 'Denying an Obvius Goal Scoring Opportunity', lo que podría traducirse como 'negar una evidente oportunidad de gol'. «No sería dogso al haber fuera de juego previo. Anulo el dogso y reanudo con fuera de juego», sentencia el juez principal, al mostrarse que Antoñito parte en su internada con medio pie de ventaja ante Fran Gámez tras el pase de Baturina. De la misma forma, su veredicto da a entender que de no haber habido 'offside' el Eldense habría quedado con nueve futbolistas.

Además, resuelve eliminando la amarilla a Gámez, suprimiendo la falta y levantando el brazo en señal de fuera de juego. Esto no se llegó a entender del todo en el graderío, que desconocía que se había revisado una posible roja, lo único incluido en el protocolo VAR, que no atiende de por sí revisiones de amarillas.

Lobete, que celebraba su primer gol con el Málaga, se quedó sin él, en el minuto 57, por fuera de juego previo de Galilea. Este luego se mueve en el momento de la ejecución del centro hacia atrás y hace falta a Timor, que defendía al autor del tanto. «El jugador choca con el defensor y le impide despejar», sentencia el árbitro al acudir al VAR y comprobar la interferencia. Todo sucedió en una falta lateral. Lobete había visto la amarilla, por celebrar la acción quitándose la camiseta, y se quedó con ella.

Otra acción un tanto complicada. Dani Sánchez centra para que Larrubia marcara al segundo palo. Lo que sucede es que el envío pasa entre las piernas de Dioni, que con inteligencia dejó pasar el balón. El problema es que el delantero estaba ligeramente en fuera de juego, por centímetros. La sala VOR pide revisión por «interferencia en la consecución del gol», y Sánchez López asume que «interfiere claramente al defensor (que era Grigore) impidiéndole rematar».