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El triunfo del Málaga de la semana anterior fue clave (ante el Ferrol en casa). Era imprescindible, y lo consiguió. Aunque ahora comienza una segunda ... parte, una competición de diez partidos en la que el equipo blanquiazul aspira a mantener las distancias o aumentarlas con la zona más baja de la clasificación para cerrar lo antes posible la permanencia, el único objetivo en este momento. Para comenzar esta serie final se mide la tarde de este domingo, a las 16.15 horas, al Oviedo a domicilio, en el Carlos Tartiere. Y para este primer envite, pese a que hace muy poco estaba 'tocado' y con necesidad de mejorar, tiene mucho que ganar.
Mucho que ganar porque los resultados de los rivales directos le están favoreciendo en el arranque de la jornada, lo que deja al equipo blanquiazul a una distancia importante del descenso (seis puntos) sin haber jugado todavía. Llega al Carlos Tartiere sabiendo que no pasará apuros en el caso de que el resultado no sea bueno, lo que deberá servirle para ganar confianza y moral en busca de una victoria, algo que sería crucial en su lucha por alcanzar lo antes posible los 50 puntos (ahora tiene 42).
Y mucho que ganar también por los problemas que está atravesando el rival, que ha cambiado al entrenador (el exmalaguista Javi Calleja deja el banquillo y lo coge Veljko Paunovic). La situación en el cuadro asturiana es complicada en este momento porque el equipo se está alejando de las plazas más altas de la clasificación, y aspira a subir. La llegada de un nuevo técnico suele considerarse como un revulsivo para reaccionar, aunque habrá que verlo en este primer partido.
Lo que sí está claro es que el Málaga no sabe qué se va a encontrar. El exatlético Paunovic pondrá en marcha una nueva etapa del Oviedo, y se desconoce cuáles serán sus planes durante el partido. Parece claro que habrá muchos cambios en el rival de los blanquiazules, que deberán estar muy expectantes ante la posibilidad de pescar en río revuelto. Esta situación inestable del equipo asturiano, sin embargo, se presenta como un 'arma de doble filo', una incógnita para los hombres de Pellicer.
Ante este importante envite, el Málaga también podría hacer algunas variaciones. El entrenador está rotando a los jugadores en los últimos encuentros, lo que abre la puerta a que siga haciéndolo en esta ocasión. Aunque la 'revolución' parece que llegará este domingo a su fin, pues Pellicer dispone ya en plena forma de algunos de sus hombres ausentes, 'tocados' o mermados. De ahí que el once probablemente será más previsible que otras veces, si bien con ciertas dudas. La primera en defensa, donde abundan los cambios últimamente. El lateral izquierdo y una plaza en el centro están en el aire, mientras que tampoco hay seguridad en quién ocupará el extremo de esa misma banda, donde pugnan por él Antoñito y Kevin. Y tampoco está cerrado quién será el delantero, si bien Dioni parte como favorito...
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