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El Málaga vuelve a citarse con su público este domingo (18.30 horas) en mitad de una profunda crisis deportiva y el ambiente que se espera en La Rosaleda será como mínimo de preocupación. Sobre este asunto reflexionó el entrenador del equipo blanquiazul, Pepe Mel, ... que busca rebajar la tensión por el bien de todos.
«Ese ambiente viene propiciado porque nosotros mismos nos lo hemos ganado. Hemos hablado de eso muchas veces y los futbolistas ya saben que esto es así y que esa misma gente que ahora está de uñas con ellos será los mismos que aplaudirán si hacen las cosas bien y les animarán», introdujo.
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«Depende de nosotros, de los actores de esta película. Nosotros tenemos que insistir en las cosas que hacemos bien y dejar de cometer los errores que nos condenan y de los que se aprovechan los rivales. Tenemos que luchar pensando que el enemigo es el Sporting, no la grada. Nosotros tenemos claro que el enemigo no está dentro, está fuera y mañana viene desde Gijón», continuó.
«Cuando termine el partido, el público es soberano y dirá lo que quiera, pero la afición del Málaga es inteligente y sabe que sólo hay una parte del club que puede propiciar que vaya mejor, y esto son los futbolistas, porque son los que compiten. Lo que quiero es que tengan el mejor espacio posible de tranquilidad y calma», sentenció el preparador blanquiazul.
Dicho esto, Pepe Mel intentó luchar desde la sala de prensa contra el pesimismo y argumentó que el equipo no se encuentra tan mal, que en Cartagena vio motivos para ser positivos. «Nosotros venimos de una derrota que nos ha reafirmado cosas de trabajo de grupo, de que como equipo somos fuertes porque fuimos capaces de reaccionar y empatar un partido que se nos puso muy adverso. Y hasta el minuto 22 que nos quedamos con uno menos tenemos la sensación de que dominamos», valoró.
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«Todo eso tiene que seguir reafirmándose este domingo. Hace tiempo de que es momento de actuar y no de hablar. Sinceramente, salí contento de Cartagena menos por el resultado y por el error que nos hizo quedarnos con uno menos. Juande respondió bien, Ramalho respondió bien también, Chavarría igual. Rubén Yáñez respondió a la confianza depositada en él. También me gustaron mucho los canteranos Cristian y Loren», valoró a la vez que dejaba entrever que dará continuidad a los numerosos cambios realizados ante el Cartagena.
En esa línea, Mel también quitó hierro a que los malos resultados también empiecen a apuntar a su gestión (va a cumplir su noveno encuentro al frente). «Me limito a mejorar e incidir en las cosas buenas que hacemos. Yo no puedo decir que cuando perdemos lo hacemos siendo inferiores al rival. En ninguno de los partidos desde que estoy aquí hemos sido inferiores, entonces lo que tenemos que mejorar son los detalles que nos hacen perder, que a veces son demasiado groseros. En eso me preocupo», zanjó.
A modo de conclusión, el técnico madrileño dio algunas pinceladas sobre el rival. «El Sporting es un equipo sólido, aguerrido y que juega con un sistema bien definido de la mano de Abelardo, que es el 4-4-2. Un equipo con buena llegada por fuera, con buen juego interior. Es un rival con el que seguramente todo el mundo cuenta para estar entre los seis primeros», finalizó Pepe Mel.
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