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No podía ocultar el entrenador del Málaga, Sergio Pellicer, su satisfacción por el punto sumado por su equipo ante Las Palmas (1-1) en un partido que tuvo un final abierto y en el que el técnico dio por bueno el empate. Dijo, eso ... sí, que la sensación fue agridulce, pero también reconoció que el cuadro canario pudo lograr la victoria, así que calificó el empate como justo.
«La sensación es agridulce -comenzó Pellicer-. En el último tramo íbamos por delante, con momentos buenos para los dos equipos. Después de conseguir el gol, pudimos lograr el segundo. Pero el rival también juega. En acciones de balón parado ellos lo hacen bien. Da pena, porque teníamos los 51 puntos en la mano. El equipo quería ir a por la victoria. Por cómo veníamos, con tantas bajas, este grupo demuestra un ejercicio de resistencia colectiva. Pelear hasta el último momento, merece felicitar al grupo. Ellos manejaron el ritmo del partido al comienzo del choque. Juegan alegre y dinámico para desestabilizar al rival, pero con los cambios dimos un paso adelante. Se nos fueron dos puntos, porque lo teníamos al alcance«, se lamentó.
A medida que avanzaba la rueda de prensa posterior al choque, Pellicer, fue variando su discurso, e incluso restó importancia al error en el gol del empate de Las Palmas, en un córner mal defendido. «No es frustración. Sabemos del peligro de las acciones a balón parado, pero hay que tener en cuenta el momento del partido. Nos ocurre a nosotros y a todos los rivales. Estas situaciones nos motivan para corregir. Es un proceso natural. Nos da rabia, porque el equipo tiene ilusión. Lo veremos y analizaremos, pero no le pongo un pero al equipo. Seguimos igual. Hemos sumado un punto ante un buen rival y con gran potencial ofensivo, y nosotros estuvimos serios y con momentos para hacer un segundo gol«, destacó.
El entrenador del Málaga destacó la aportación de los jugadores que salieron desde el banquillo, como Scepovic, que marcó el tanto malaguista, y volvió a demostrar su solvencia en el área. «Estamos contentos co con él. Somos un equipo en el que los que salen del banquillo no estaban aportando goles, pero sí trabajo. Me alegro por él. Nos faltó algo de calma en algunas acciones. Es una alegría que esté todo repartido, porque es un grupo con hambre e ilusión. Tenemos muchos problemas y gente como Scepovic y Joaquín nos dan energía«, reconoció.
Preguntado por si su equipo está salvado y si puede mirar ya a la zona alta de la clasificación, Pellicer volvió a tirar del freno de mano y, aunque el Málaga tiene ya 49 puntos, insistió en que no se fía. «No es matemático. El año pasado ya vimos lo que ocurrió. Lo tenemos en la palma de la mano. Nos falta una victoria. El fútbol da muchas lecciones, porque cuando te duermes viene alguien y te da una colleja. Lo tenemos cerca, no es matemático. Tenemos la ilusión de mirar hacia arriba. Muy mal lo debemos de hacer para que el año que viene no estemos en esta categoría. Estamos atentos para ver lo que pasa por arriba. Todos los equipos pelean por terminar lo mejor posible y lo haremos«, finalizó.
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