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El entrenador del Málaga, Sergio Pellicer, no ocultó este mediodía, en rueda de prensa, el castigo físico de su plantilla, que afronta este martes (19.00 horas) en Fuenlabrada su cuarto partido en diez días. «Después del esfuerzo en inferioridad numérica (ante el Lugo) ... hemos tenido poco tiempo para recuperar y sufrimos el problema de Ismael y de Jairo y la sanción de Caye (Quintana). Hay jugadores que están atravesando sobrecargas y hasta última hora tendremos que valorar, e incluso llevamos también a gente que jugó el domingo con el fliial«, reconoció.
El técnico no quiso utilizar este problema como excusa, porque es la realidad que afecta también a los rivales. «Es un maratón de partidos y será necesario que entren y salgan jugadores, y lo tendran que entender de forma normal. Este proceso de exigencia es muy grande y no es como antes, que se jugaba cada siete días y se podía tener un once de carrerilla. Ahora en la competición de élite es imposible«, sotuvo.
Respecto al Fuenlabrada, dejó claro que es un rival de los más difíciles posibles en este momento: «Es un equipo histórico de la comunidad y quiere ser también un histórico en el fútbol español. El año pasado no jugó el play-off por las circunstancias que se dieron (la polémica con sus positivos por Covid-19) y este año ha hecho una inversión fuerte. Habéis visto con Mula. No tiene masa social como otros clubes de la categoría, pero quiere estar arriba«.
En lo deportivo, valoró su potencial ofensivo y su nivel en el Fernando Torres: «Tiene un gran poder físico y maneja bien el ataque posicional. En su estadio no ha perdido y es fuerte, pero iremos a por los tres puntos, aun sabiendo de su potencial. Tenemos que tener una exigencia de responsabilidad a nivel defensivo, ser más solidarios, lo que en algunos partidos nos está lastrando y penalizando«. Aunque le preguntaron sobre si fuera de casa volvería la defensa de cinco, tras dos citas con un 4-2-3-1 en casa, dijo que »del dibujo no voy a dar pistas«. »Lo sabemos perfectamente, con la duda de los nombres, porque hay jugadores con molestias -matizó-. «Va a ser una buena prueba de fuego. Una victoria nos haría mirar hacia posiciones más avanzadas. Ese negativo que tenemos en los goles si lo convertimos en positivo nos hará estar arriba».
el duelo de este martes en fuenlabrada
Sobre la pérdida de minutos de Cristian, que fue titular en los primeros partidos, comentó: «No me gusta individualizar. La competición es un proceso, y hay que encontrar el mejor momento de los jugadores, y lo importante es que valoren no la cantidad de minutos que jueguen, sino la calidad. Estamos contento con él. Cuando hay situaciones de no estarlo con el rendimiento de alguno en el entrenamiento se los decimos, pero no es el caso. Todos somos uno, no hay estrellas. La única es el escudo del Málaga«.
También le plantearon si el Málaga tiene que mirar ya hacia arriba, al tener diez puntos de colchón sobre la zona de descenso y estar a dos de la de los 'play-off'. «En poco espacio de tiempo hay muchos puntos y hay dinámicas, equipos que pueden ganar cuatro o cinco partidos seguidos. Queremos mantener el equilibrio de seguir sumando, ganando partidos. ¡Quién nos iba a decir que íbamos a tener esta situación! Aunque sea un tópico, hay que mirar partido a partido, ser ambiciosos con los pies en el suelo. Queremos que no haya dudas, que se vea rendimiento, más allá del contexto de cada partido«.
En las horas previas a otro compromiso fuera, admitió que su equipo está rindiendo mejor en las salidas: «Las estadísticas están ahí. No es casual. Fuera estamos mejor que el año pasado. Influye el rival y el público. Ha habido un fútbol antes del Covid-19 y otro después. Tenemos que ser autocríticos. En el próximo partido de casa habrá que ir puliendo defectos«.
Finalmente, ensalzó la madurez de Juande, tras malos momentos vividos y ahora máximo realizador del equipo, con cuatro dianas, siendo un central: «Lo importante es el proceso, la montaña rusa de emociones. Contra el Leganés se supo recomponer. Empezamos hace once meses. Debutamos en el mismo partido. Llegar a la élite es difícil pero mantenerse más. Hay que tener un equilibrio mental. Es un ejemplo para muchos chicos. En el momento en que debuta alguien si no tiene rendimiento se va cayendo. Hay que superar los obstáculos y mirar hacia delante. El fútbol es una selva competitiva, así que significa que en cada entrenamiento hay que evolucionar a nivel físico, mental, técnico... No es una medalla nuestra, es una medalla de él«.
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