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Semanas atrás se había dado por hecho su fichaje por el Rayo, equipo en el que deslumbró hace cuatro temporadas, pero pasaron los días y no se anunció. Y de repente fue el Málaga quien confirmó la incorporación de Jozabed, uno de los futbolistas más apetecibles del mercado para los clubes de Segunda. En muchos de estos ha sorprendido su llegada al equipo blanquiazul si se tiene en cuenta la complicada situación económica por la que atraviesa. La clave radica en que el centrocampista sevillano necesita recuperar la confianza, sentirse importante, y tanto Sergio Pellicer como Manolo Gaspar emplearon sus dotes de persuasión para convencerlo.
En la temporada 2015-2016 Jozabed fue una de las relevaciones en Primera División en su segundo año en el Rayo: 27 partidos (24 como titular), 10 goles y tres 'asistencias'. El centrocampista nacido en Mairena del Alcor había surgido de la cantera del Sevilla y había sido el futbolista más destacado en aquel Jaén que no pudo mantenerse en Segunda de la mano del exmalaguista Manolo Herrero. Precisamente en La Rosaleda habían seguido sus pasos desde que jugaba en el filial sevillista y manejaron la opción de ficharlo, pero finalmente no se concretó la operación.
Después de una primera temporada de adaptación a la élite, la irrupción de Jozabed en el Rayo lo convirtió en un futbolista apetecible. El Fulham no tardó en incorporarlo, pero el paso del sevillano por la segunda categoría inglesa fue efímera y a mediados de la temporada recaló cedido en el Celta. Para Eduardo 'Toto' Berizzo fue indiscutible durante el segundo tramo del campeonato: jugó 19 partidos, 12 como titular, marcó dos goles y dio dos 'asistencias'. El club vigués ni lo dudó: en julio pagó 3,5 millones al cuadro londinense para quedarse con su propiedad.
Sin embargo, en los tres últimos años Jozabed ya no ha sido el mismo. Poco a poco el futbolista empezó a perder confianza y ya no tuvo continuidad como titular en el Celta (18 y 14 partidos). Por último, la pasada temporada fue cedido al Girona, donde estaba llamado a ser importante en el proyecto para retornar a Primera División, pero su papel fue intrascendente. Sus datos son muy elocuentes: 12 partidos, sólo cinco como titular.
Jozabed contaba con varias propuestas desde finales de julio, pero su decisión final y su elección por el Málaga obligan a recordar aquella frase empleada por Weligton cuando recaló en el equipo blanquiazul. «A veces es muy importante dar un paso atrás para luego dar dos hacia adelante», recalcó el que a la postre fue uno de los mejores centrales de la historia del club. El sevillano sabe que necesitaba estar en un equipo en el que se sintiera importante y ahí Manolo y Pellicer supieron jugar sus bazas frente a otros conjuntos que le ofrecían un sueldo más alto. Además, la cercanía de casa (a unas dos horas de camino) también jugó a favor en la negociación para su fichaje.
Futbolista de buen toque de balón y con llegada, Jozabed está destinado a ser pieza clave en el Málaga. Pellicer es consciente de que con él y Cristian puede alternar sistemas y también situaciones tácticas. De su calidad no se duda lo más mínimo –al contrario, lógicamente–, pero sí se asume que el sevillano debe ganar mucho en confianza. Tras sus intermitencias en las tres últimas temporadas su estado de ánimo sólo mejorará con continuidad y, aunque deberá ganarse el puesto en el día a día, el centrocampista organizador es consciente de que en un conjunto como el blanquiazul, limitado de efectivos por la sanción de LaLiga, va a tener claras opciones para dar el mejor nivel. Sin duda, el Málaga puede ser el mejor lugar para relanzar su carrera.
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