El Málaga, bestia negra del Barcelona

Tener un potencial inferior no está reñido con la sorpresa. El Málaga es ya por derecho propio la bestia negra del Barcelona en los últimos tiempos en el torneo liguero. Concretamente, desde la llegada de Luis Enrique al banquillo del cuadro culé. A partir de ese momento y tras la proeza de ayer (2-0) son ya dos triunfos, otros tantos empates e igual número de derrotas en las tres últimas campañas, un balance que, sin ser especialmente llamativo de por sí, sólo admite el calificativo de sobresaliente ante un rival que reúne tal talento ofensivo. Un bagaje también del que no puede presumir casi nadie.

La etapa de Gracia en el Málaga se caracterizó por excelentes planteamientos contra el Barça. El cuadro dirigido por el pamplonés casi siempre se mostró como un equipo sólido y fiable en defensa, y eso sumado al plus de motivación con el que se suele jugar este tipo de encuentros ofreció grandes réditos.

Merced a un gol de Juanmi el Málaga ganó en el Camp Nou (0-1 el 21 de febrero de 2015), y también perdió en otra visita posterior por la mínima (1-0, tanto de Vermaelen). Luego, en la primera vuelta de esta campaña, el cuadro de Martiricos logró un inesperado 0-0, en un duelo en el que los dos equipos llegaron muy mermados por las bajas. El local, sin Messi (ausencia de última hora) ni Luis Suárez, y con Neymar fatigado por un viaje con su selección. El de Juande Ramos, con hasta nueve bajas, algunas también de peso.

Sorpresa también de local

La capacidad de sorpresa también la ha tenido el Málaga de local, con un 0-0 con Gracia en el inicio de la campaña 2014-15. La campaña anterior se dio, por contra, un apurado 1-2 (23 de enero de 2016), con dianas de Munir, Juanpi y Messi. Finalmente, el 2-0 de ayer es probablemente el más meritorio de los resultados logrados en este periodo analizado. El Málaga batió a un rival que se jugaba el título liguero y que podía colocarse líder ganando. Más allá de que jugó la última media hora con superioridad numérica (primera expulsión liguera de Neymar) es más que elogiable haber sorprendido a un rival con sus tres estrellas de ataque y con un once muy competitivo (pese a la sanción de Piqué y Rakitic).

Además, el planteamiento de Míchel (que logró su primer triunfo ante el Barcelona como entrenador) fue muy inteligente, con un 5-4-1 en el que se protegió mucho la zona central del campo para impedir penetraciones del rival y que este jugara cómodo con el balón. En la medular Camacho, Recio, Pablo y Juanpi formaron un rombo con el venezolano como jugador más adelantado.

Con todo, el dato más significativo es que este Málaga, que aún no tenía esta semana nada segura la permanencia, ha sido capaz de jugar 180 minutos contra el Barcelona esta campaña sin recibir un solo tanto. Sin duda, si finalmente los pupilos de Luis Enrique no revalidan su título liguero mucho tendrá que ver su doble tropiezo ante los blanquiazules.