Málaga, aprieta los dientes

Amenazado por la zona de descenso, el equipo de Javi Gracia todavía sigue buscando la estabilidad y el acoplamiento de una plantilla con muchas novedades. Ocho jornadas después, el Málaga no ha encontrado aún el camino. Las constantes ausencias de sus hombres importantes impiden una semana tras otra que el bloque pueda consolidarse. Además, hay posiciones que siguen sin dueño. Pero todos coinciden en que estos aspectos, pese a su importancia, deben pasar a un segundo plano para centrarse hoy solo en el triunfo, en los tres puntos.

Regresan los dos medios centro que se perdieron el choque de Mestalla (Tissone y Recio) y se queda fuera Camacho tras su reaparición (ha vuelto a lesionarse). Gracia, en cualquier caso, planea algunos cambios, aunque ayer insistió en que no va a hacer una revolución. Retocará la fórmula de juego para adaptarse al rival y para potenciar las virtudes de su equipo. También existe la duda sobre la participación del joven Pablo, que fue el mejor de los malaguistas en el choque de Mestalla. Este centrocampista podría jugar en la banda o acompañando a Tissone y Recio.

Fuerte en casa

El Málaga deberá hacerse fuerte en casa para comenzar una nueva racha positiva. El triunfo reactivaría al equipo y lo colocaría en la zona media y tranquila de la tabla, mientras que la derrota sería nefasta, ya que las opciones de entrar en las plazas de descenso serían máximas. De ahí que la plantilla esté concienciada de la trascendencia del choque, igual que la afición, que prepara un gran recibimiento en el estadio para animar a los jugadores.

El Deportivo, por su parte, afronta el choque de La Rosaleda sin haber perdido todavía ningún partido fuera de su estadio. Su técnico, Víctor Sánchez del Amo, tiene la duda del portero Manu, que arrastra molestias musculares pero ha entrado en la convocatoria. Al once regresará el internacional costarricense Borges y también tienen opciones Laure, entre otros.