Samu, en la mañana de ayer en el estadio de atletismo.

Samu: «Todavía no he dado todo lo que puedo dar; quizás debería creer más en mí»

El medio punta malagueño, que jugó como titular por primera vez ante el Córdoba, abrió el marcador con un gol de bandera

Juan Antonio Morgado

Jueves, 23 de octubre 2014, 23:56

Fue titular por primera vez esta temporada el sábado, y lo celebró a lo grande, con un gol que abrió la victoria en Córdoba, segunda seguida. La jugada tuvo el doble componente de un desmarque fugaz que dejó en evidencia a la zaga rival y ... un toque sutil que desconcertó al portero. Samu empezó en el Puerta Blanca y se curtió en el Conejito. Ahora, a sus 24 años, es uno de los veteranos en ese grupo de jóvenes canteranos malagueños que tanto destacan en estos albores de la campaña. Vinculado por contrato al Málaga hasta 2017, un percance le impidió hacer una pretemporada al uso, lo que retardó su aparición en la segunda temporada en la máxima categoría.

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El sábado salió por primera vez esta campaña en la alineación inicial y marcó un gran gol. Eso se llama llegar y besar el santo, ¿no cree?

La verdad es que estoy muy contento por haber jugado mi primer partido como titular y haber marcado mi primer gol de la temporada. Espero contar con muchos más minutos y marcar muchos más goles.

¿Lo ha pasado mal al no verse en la alineación a causa del retraso en la preparación?

Pues sí, porque desde la pasada campaña estaba acostumbrado a jugar, y la verdad es que, al principio, cuando no te ves en el once inicial y a veces ni en las convocatorias, lo pasas mal, pero seguiré trabajando para tener el máximo de minutos posible.

La cantera malaguista está de moda, ¿a qué se debe?

-No lo sé exactamente, pero sí es cierto que están subiendo muchos jugadores del filial, de lo cual hay que alegrarse, por supuesto, y también es de agradecer, y como malagueño que soy pido que ojalá salgan muchos más.

Si el filial estuviera en Segunda B como mínimo, el salto sería más fácil, ¿no cree?

No lo sé, pero la verdad es que hay muchos jugadores en la cantera. De unos años para acá estamos viendo cómo están saliendo numerosos canteranos, y esperemos que sigan saliendo por el bien del fútbol malagueño.

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¿Es cierta esa frase tan manida que dice que lo difícil no es llegar, sino mantenerse?

Es verdad. Llegar depende muchas veces de tener un poco de suerte. Yo llegué, afortunadamente, pero es cierto que lo complicado para mí es mantenerme.

Usted irrumpió en el primer equipo el año pasado de la mano de Schuster, ¿se lo debe todo al técnico alemán por hacerlo debutar en Primera?

A Schuster y a Fabio (Celestini) les debo mucho, porque a lo peor si no hubiera sido por ellos no estaría aquí. Se lo agradeceré siempre, por supuesto.

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Ya ha jugado en casi todos los puestos del centro del campo y del ataque, ¿pero en cuál se siente más cómodo?

En cualquier puesto de la zona del ataque, aunque donde he jugado más ha sido de segundo punta. Pero jugaré donde me diga el míster.

A pesar de no ser un goleador por excelencia, usted tiene una especial habilidad para lograr goles de gran calidad y belleza, ¿cuál es su secreto?

Por suerte he marcado goles bonitos, y lo que voy a hacer es intentar marcar todos los que pueda esta temporada. Haré todo lo posible para ello, aunque me da un poco igual si el gol es bonito o no, ya que lo importante es que el balón entre.

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¿Qué gol es el que mejor recuerda?

El del Betis, el del Sevilla y también el que le hice al Atlético de Madrid, y, por supuesto, el último contra el Córdoba.

¿Hay esta temporada en el Málaga más competencia que la anterior, sobre todo para un medio punta como usted?

No me gusta llamarlo competencia, porque esta llega de los rivales, pero sí es verdad que en cada posición hay tres o cuatro jugadores y eso viene bien para que nadie se duerma.

En las categorías inferiores era un jugador de mucha técnica y calidad, ¿cómo lleva lo de ponerse el mono de trabajo en el primer equipo, aunque sea en la élite?

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La verdad es que me ha costado un poquito adaptarme a esa función, porque nunca he sido un jugador al que se le pidiera defender tanto, y sin embargo ahora en Primera División es algo esencial. Me estoy haciendo a ello, y la verdad es que estoy muy contento, porque jugar es lo importante.

¿A qué entrenador tiene más que agradecerle desde sus comienzos en las categorías inferiores?

A Rafa, del Conejito; a Rafa Gil, del filial, que fue el que hizo que viniese al Málaga, y también a Antonio Benítez.

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¿Cuándo veremos al mejor Samu?

-Siempre he dicho que todavía no he dado todo lo que puedo dar, quizás porque necesito creer un poco más en mí, pero del último partido salí muy contento, y no solo por mí, sino por lo que hizo el equipo, que logró un gran triunfo.

A pesar de tener solo 24 años, es el veterano entre los jóvenes del equipo, ¿cómo se ve?

Es curioso, sí, pero si puedo intento darles consejos a los más jóvenes y ayudarlos en todo lo que pueda, como siempre he hecho.

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