Pedro Luis Alonso
Jueves, 11 de septiembre 2014, 23:41
En el deporte de élite nunca hay un resultado predeterminado, por más que haya disciplinas que se exponen menos a las sorpresas. El miércoles se vio una de ellas: Francia derrotó con justicia a España en el Mundobasket, cuando una semana atrás había sucumbido con estrépito ante el mismo rival. Por ello y por muchos más argumentos, el Málaga recela del Levante, pese a que para muchos quinielistas o apostantes, el partido apunta a un triunfo local.
Publicidad
Los números van con el Málaga, aunque los protagonistas del partido no lo tengan tan claro. Quizás porque si algo ha caracterizado al Levante de los últimos años ha sido su rigor táctico, que le ha permitido completar sus tres últimas temporadas en la zona media de la tabla pese a disponer siempre de plantillas sin grandes estrellas. Daba igual que estuviera al frente Luis García, Juan Ignacio Martínez o Joaquín Caparrós. El cuadro azulgrana siempre planteó numerosas trampas a sus rivales para verse superados en defensa, y tuvo mucho oficio en su desempeño.
José Luis Mendilibar y Javi Gracia fueron los entrenadores del Osasuna la pasada campaña y sobre ellos, además de los deméritos de la plantilla que dirigieron, recae la responsabilidad del descenso del equipo. Mañana serán rivales en La Rosaleda, debido a la nueva aventura que ha emprendido cada uno en los banquillos.
Hay matices para explicar lo sucedido a cada uno de ellos en la temporada anterior. Mendilibar solo estuvo tres partidos en el Osasuna y no puntuó 1-2 del Granada, 2-0 en San Mamés y 0-3 del Villarreal. La directiva no esperó más y le destituyó, en uno de los ceses más tempranos en Primera en los últimos tiempos. Gracia sumó luego 39 puntos en 35 jornadas, un promedio que no es del todo malo y que suele garantizar la permanencia, pero el lastre inicial permitió que tampoco pudiera lograr el aprobado final. La relación entre estos dos entrenadores, el vizcaíno y el pamplonica, es buena, y lo sucedido en el ejercicio anterior ha podido servirles de escarmiento y aprendizaje. En todo caso, Mendilibar podría volver a perder un tercer partido de nuevo.
Lo cierto es que el Málaga ha ganado en sus cinco últimas citas contra el Levante en La Rosaleda, en todas las que ha jugado en la élite con su actual denominación. Este historial tan positivo de precedentes, en un número mínimo de partidos, no se da contra ningún otro contrincante. Frente al Levante se despidió con éxito la última campaña, en un duelo adelantado a un viernes ante la intrascendencia deportiva del choque. Fue Portillo (que ha marcado en dos partidos distintos contra el Levante), el autor del gol que marcó las diferencias.
Diop y David Navarro, dudas
Los choques previos también se decidieron con triunfos por la mínima, salvo el 3-1 de la temporada 2012-13, la del Málaga en la Champions. Entonces, por las mismas fechas que ahora (mediados de septiembre), los blanquiazules no acusaron las rotaciones de jugar en Europa y ganaron con mayor holgura. Antes los encargados de resolver fueron Rondón (Liga 2011-12), en un resultado que acercó al Málaga a la ansiada plaza de Champions; Eliseu (campaña 2010-11), y Amoroso, en uno de sus escasos goles de malaguista, porque el brasileño llegó muy castigado físicamente al cuadro de La Rosaleda.
Ya no solo los precedentes dejan una estela de optimismo antes del choque de mañana. También la situación en la que comparece el Levante. A priori, parece uno de los equipos que se ha debilitado en cuanto a potencial deportivo respecto al pasado curso. Sobre todo, con la marcha de Keylor Navas al Real Madrid, que se había convertido en uno de los mejores porteros de la categoría. Además, el club ha logrado mantener en sus filas a otro de sus pilares, el medio centro Diop (que tuvo ofertas de otros países), pero el senegalés no volvió hasta ayer de la concentración con su selección. Esta en la misma situación que el Mozambiqueño Simao, y además están lesionados Juanfran, Gavilán, El Adoua y Karampelas. La última preocupación es otro de los jugadores importantes, el central David Navarro, que tiene unas molestias musculares y podría causar baja.
Publicidad
Demasiados problemas frente a un Málaga que ha mostrado buenas hechuras en las dos primeras jornadas, saldadas con resultados dispares (triunfo ante el Athletic de Champions y derrota polémica en Mestalla). A eso se le une el previsible debut de Amrabat (curiosamente, su último partido con el Málaga fue ante el Levante) y la presencia del jeque Al-Thani en el palco del estadio, en una nueva visita a la ciudad. Todo eso se junta con la condición de colista del rival. Hablar de ello con solo dos jornadas disputadas, parece exagerado, pero es el único conjunto de Primera que no ha puntuado, el único que no ha marcado y también el que más tantos lleva en contra (0-2 del Villarreal y 3-0 en San Mamés).
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Santander, capital de tejedoras
El Diario Montañés
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.