Mula, de llorar por el Málaga a rival por el ascenso a Segunda

Llegó a debutar con el Málaga en Primera División (jugó 13 partidos en la campaña 17-18, la última de los blanquiazules en la máxima categoría) y formó parte de la plantilla blanquiazul en el primer año de Segunda, cuando el equipo fue eliminado por el Deportivo de la Coruña en La Rosaleda. Mula dejó precisamente una de las imágenes de aquel partido por su llanto incontenible.

Luego tuvo una exitosa cesión en el Tenerife, pero a su vuelta a Málaga todo fue de mal en peor hasta el punto de vivir una de las peores épocas de su carrera deportiva en el verano de 2019. Fue cuando el Málaga le dejó sin ficha (también le pasó a Iván Rodríguez) por no saber gestionar sus problemas económicos y el tope salarial de la Liga.

Un desastre protagonizado por el denostado director deportivo José Luis Pérez Caminero, que en aquel momento también quedó señalado por la marcha del fichaje mediático Okazaki por no poder inscribirlo en competición. Así que Mula estuvo media temporada sin poder jugar, entrenándose con mucha frustración, hasta que pudo salir en invierno cedido al Alcorcón.

Al verano siguiente se marchó al Fuenlabrada diciendo adiós definitivamente al Málaga y en el curso 21-22 vive el descenso del conjunto madrileño, donde estuvo entrenando unos meses Sergio Pellicer, actual entrenador blanquiazul. Mula siguió en Segunda al año siguiente en el Alcorcón, con el que también perdió la categoría.

Tras esto, Mula probó suerte en el extranjero. Primero en el Wisla Cracovia polaco y luego en el PAS Lamia de Grecia. Dos etapas muy breves hasta que en el pasado enero fichó por el Gimnástic de Tarragona como refuerzo de invierno y para volver a estar cerca de su tierra natal, ya que creció en Premiá de Mar (Barcelona).

Desde su llegada al Gimnástic ha sumado 17 partidos en total, siendo 8 de ellos titular. Ha acumulado 740 minutos y ha ofrecido una asistencia de gol. No jugó en el último partido contra el Ceuta, y tampoco se espera que sea titular en La Rosaleda, aunque no se descarta que participe como revulsivo. Será su regreso al campo de Martiricos después de hace casi tres años. La última vez que estuvo fue con el Fuenlabrada.