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El equipo afrontó esta tarde de lunes la penúltima sesión de entrenamiento previa al que será el único 'stage' de esta pretemporada. No hubo demasiadas novedades y las buenas noticias ganaron en número a las malas. Saltaron al césped del Anexo, escenario habitual del trabajo ... del primer equipo, para ejercitarse en grupo todos menos Ramón y Luismi Sánchez.
El centrocampista de La Alpujarra se ejercitó en el gimnasio y el de Puerto Serrano, uno de los cuatro fichajes que ha cerrado el Málaga en lo que va de verano, pisó el césped del campo suplementario de La Rosaleda antes que sus compañeros, para luego continuar entrenándose en las galerías interiores junto a su homólogo en el medio campo. No se trata de un problema físico grave: terminó la temporada pasada con el Oviedo algo cargado y no estuvo en los dos primeros amistosos, frente al Almería y al Al-Jazira, por precaución. También apunta a ausentarse en el tercero y último, que se jugará el sábado ante el Córdoba en La Línea de la Concepción.
Estuvieron con el resto del grupo, como ya hicieron la pasada semana, Haitam y Moussa, que arrancaron la pretemporada al margen por lesión. El central ya acaba las sesiones, mientras que el extremo, que confirma sus buenas sensaciones día tras día, se suele quedar al margen de la sesión cuando los ejercicios implican contacto, por pura precaución. Ambos apuntan a estar disponibles para el primer tramo de la competición oficial en Segunda, mientras que con Ramón el club no se pone plazos.
La adaptación de los nuevos fichajes es cada vez mejor. Integrados y encantados con el grupo, Pastor y Baturina continúan acumulando sensaciones y Lobete completó su segunda sesión de trabajo junto a los que son sus nuevos compañeros. La concentración que el equipo afrontará desde este martes y hasta el sábado será también fundamental para que las nuevas piezas terminen de encajar en un grupo que se une a la Segunda División bien cohesionado. Mientras, por otro lado, Andrés Caro y Juan Hernández, a los que el club busca una salida, se entrenan con normalidad a la espera de encontrar un nuevo destino. El club acelera en este sentido y está muy pendiente del mercado, aunque por el momento no hay novedades.
Tras unos días dándole prioridad al apartado físico, el grupo llevó a cabo una sesión de trabajo corta (de algo más de una hora), pero muy intensa y llena de ritmo, en la que el balón y el calor fueron protagonistas casi a partes iguales. Realizaron un calentamiento intenso para activarse, rondos, desplazamientos en largo y, para terminar, situaciones de partido, divididos en dos equipos, para ensayar los centros laterales. Como es habitual, hubo corrillo y charla del técnico, Pellicer, que llevó la voz cantante de la sesión.
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