El Málaga cierra al 'nueve' deseado, Sekou, pero Osasuna se entromete con Ontiveros

Con Sekou todo sigue su curso y se espera un anuncio oficial pronto, pero Ontiveros ha dado un volantazo y se dirige hacia Pamplona. El club blanquiazul esperaba ya al marbellí en La Rosaleda cuando una llamada lo cambió todo. Osasuna, que busca desde hace días un extremo para sustituir la baja de larga duración de Kike Barja, se ha fijado en el malagueño del Villarreal para reforzarse de última hora, cuando ya daba prácticamente por cerrada su plantilla.

Este movimiento del club navarro dinamitó el trato que ya estaba cerrado entre el Málaga, el conjunto castellonense y el propio Ontiveros, que igual que fue clave para encajar su llegada a Martiricos también lo ha sido ahora para detenerlo todo. Según pudo conocer este periódico fue el propio futbolista quien contactó con el director deportivo malaguista, Manolo Gaspar, para informarle del cambio de planes.

En el Málaga lo tenían todo preparado para su llegada (incluso estaba lista la elaboración del anuncio oficial), que además iba a suponer un gran impacto mediático. Un golpe de efecto que se queda ahora diluido y que incluso empaña la llegada de Sekou, que sí sigue su curso y podría confirmarse en las próximas horas. La decepción es total en las oficinas de la entidad blanquiazul, donde no se comprende el cambio de decisión de la otra parte.

Es obvio que prevalece el aspecto económico, ya que Osasuna cuenta con mayores recursos para ofrecerse a pagar el salario completo del jugador (como hizo el Huesca la temporada pasada), pero en el Málaga no creen que la oferta deportiva sea mejor, aunque su destino ahora sea Primera División. En el club blanquiazul habían prometido galones y un puesto de prestigio en el vestuario. Todo para ser el jugador franquicia.

Pero tanto Ontiveros como el Villarreal siguen considerando que seguir en Primera, aunque sea sin garantía de jugar demasiado, es la mejor de sus opciones para revalorizarse y dar un salto en su prometedora carrera (aún tiene 23 años). Como ocurría con el Málaga, Ontiveros aún no ha firmado el contrato de cesión a Osasuna, por lo que su situación sigue sin cerrarse del todo. Sin embargo, en el club blanquiazul dan por cerrada la opción de traer de vuelta al malagueño.

El Málaga sigue presentándose como el trampolín ideal para Sekou. El delantero del Valladolid recalará en La Rosaleda como cedido por una temporada. Una operación que el conjunto malagueño ha podido completar porque ha llegado a este punto del mercado de fichajes (quedan pocos días antes del cierre en la próxima medianoche del martes) con cierto poder económico gracias al acuerdo de LaLiga con CVC. Ha elevado su presupuesto a los seis millones de euros y esto ha sido un aspecto clave en la contratación. También para cerrar el acuerdo con Ontiveros, que estaba hecho a falta de la firma.

Aunque con Sekou el trabajo viene de antes (no es una oportunidad de mercado como la de Ontiveros). La dirección deportiva ha realizado un análisis constante de la situación del ariete durante el verano y le ha trasladado su confianza ciega para ser el perfil potente y rematador que buscaban para completar el ataque. «Ese perfil no lo tenemos; hay varias opciones: un 'nueve' rematador y otro que se mueve en los últimos tres tercios, de calidad... Veremos qué pasa estos días», declaró el técnico del equipo, José Alberto.

Gracias a su labor previa, el Málaga ha podido rematar la faena en cuanto el Valladolid ha aclarado su planificación y lo ha puesto en el mercado (vendió a Marcos André al Valencia por ocho millones y busca fichar a Sergio León y a Cristo González –otro anhelo malaguista– con eso tras la decisión del entrenador, Pacheta, de no contar con Sekou). La temporada pasada, Sekou anotó cinco tantos en sólo nueve encuentro con el Fuenlabrada (estuvo lesionado casi toda la campaña por una fractura).

En anteriores cursos logró hacer nueve tantos con el Almería (uno de ellos ante el Málaga con una gran actuación en La Rosaleda) y otros tres en su primera cesión al Fuenlabrada. Esto le ha convertido en un delantero cada vez más conocido en Segunda. Destaca a primera vista su físico. Mide 1,85 metros, pero aparenta más por su constitución. Una condiciones que le han convertido en una prioridad de la malaguista en su búsqueda de un ariete rocoso y rematador que saque partido a los centros que lleguen desde las prolíficas bandas.