Comienza la Liga para el Málaga. Después de una corta pretemporada y sólo tres amistosos, el equipo blanquiazul levanta el telón en su regreso a ... Segunda, al fútbol profesional. Y lo hace con la satisfacción de un épico ascenso hace menos de dos meses y después de una temporada en el 'infierno' de la tercera categoría del fútbol. Su estreno será este sábado, a las 17.00 horas, en el campo del Ferrol en lo que se prevé como un interesante encuentro de dos rivales muy diferentes. El duelo se prevé competido y equilibrado.
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Atrás queda un año de sacrificio y sufrimiento tanto para los protagonistas (el equipo, los técnicos y los dirigentes) como para una afición siempre fiel, animada y completamente volcada. Ahora comienza un nuevo proyecto con la ilusión por las nubes y con el objetivo de consolidarse en Segunda, con la mente puesta en cometer los mínimos errores para que la campaña que arranca sea más tranquila que las últimas. Para ello será necesario que la adaptación de todos sea rápida y que los buenos resultados vayan llegando.
Muchos de los futbolistas del Málaga conocen bien esta categoría, lo que supone una cierta ventaja para alcanzar el mejor nivel lo antes posible. Luego queda pendiente el cierre de la planificación, de los fichajes. Podrían llegar varios refuerzos, pero fundamentalmente están en el club a la espera de la incorporación de un delantero goleador, una pieza imprescindible para este nuevo reto en Segunda. Para esta posición están Baturina y Dioni, pero será imprescindible que llegue un tercer hombre para esta línea clave.
El Málaga de Pellicer afronta este primer envite como un examen inicial para conocer cuál es su potencial real para esta campaña. Continúan casi todos los jugadores de la campaña anterior, salvo cinco de ellos (cuatro titulares fijos), mientras que se han incorporado ya con la mente puesta en la 'división de plata' cuatro fichajes para distintas posiciones: el defensa Álex Pastor, el extremo Lobete, el centrocampista Luismi y el delantero Baturina. Las sensaciones de la pretemporada, en general, han sido positivas, pero ahora habrá que refrendarlas en la competición, con puntos en juego.
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La fortaleza del grupo formado lo consideran internamente como una de las grandes bazas del equipo. De ahí que todos ellos afronten el debut con optimismo y con la ilusión de consolidarse durante la campaña. El Málaga militaba en Segunda hace poco más de un año, pero apenas quedan jugadores de aquel momento. Es un nuevo equipo conformado en ese periodo para dos categorías diferentes.
Atendiendo a los tres amistosos, el once de Pellicer para comenzar puede ser hasta relativamente previsible. Aunque la ausencia de un 'pivote' para este encuentro puede llevarlo a hacer algunas variaciones, incluso en el sistema de juego. Esta labor la realizaba Genaro, que salió de la plantilla, mientras que ahora ha llegado para esta plaza Luismi. Pero el gaditano tiene algunas molestias que le han impedido entrenarse con normalidad durante la pretemporada y ahora ha quedado fuera de este primer encuentro.
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Para suplir a Luismi, el técnico tendrá que utilizar a otros hombres más creativos, lo que lo obligará a poblar algo más esa zona del campo para no verse sorprendido ante un Ferrol que afronta el partido sin el defensa David Castro y con la duda de Dorrio.
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