El Málaga suma ya 259 minutos sin encajar un gol

Frente al Huesca, además de los números, también acompañaron las sensaciones. Salvo un pase fallido de Nelson en la primera parte que a punto estuvo de costarle un disgusto al Málaga, la actuación del portero, los defensas y los centrocampistas en este apartado fue muy seria. Destacó la actuación de Luismi Sánchez, que rindió, por primera vez en el curso, al nivel de las expectativas que se depositaron en él en el momento de su fichaje. Y en la línea del encuentro ante el Córdoba, los laterales también hicieron un partido soberbio para mantener a raya al Huesca.

No tuvo demasiado trabajo el guardameta Alfonso Herrero, más allá de algunas acciones en las que tuvo que intervenir (precedidas, en su mayoría, de faltas o balones laterales), algo significativo y revelador sobre el buen trabajo de defensas y centrocampistas. El Málaga ya fue uno de los equipos referencia de la Primera RFEF en el apartado defensivo la pasada campaña, siendo uno de los menos goleados. Y su inicio liguero en Segunda tras obrar el ascenso demuestra que esta virtud no es cosa de la categoría y que forma parte del ADN del equipo y de la idea que el entrenador quiere proyectar en su equipo.

Estos números tienen una lectura extra, que toman valor con el tiempo si se analizan algunos detalles del debut liguero del Málaga. El cuadro blanquiazul mostró, en el partido inaugural, frente al Racing de Ferrol en A Malata, serias carencias a la hora de defender balones laterales y jugadas a balón parado. Ahora, tras dos partidos en los que bordó el 'arte' de defender, se presenta como un equipo 'rocoso', una faceta que espera prolongar de ahora en adelante, con un calendario que se endurece y que exigirá al Málaga seguir ofreciendo su máximo nivel.