Sekou, una inversión nefasta

Vaya por delante que Sekou no ha causado baja últimamente por problemas físicos, sino por baja forma. En alguna ocasión el anterior entrenador, Natxo González, recitó la situación de los delanteros y ni siquiera lo citó. En el vestuario, todo hay que decirlo, no entienden ese 'dejarse llevar' del ariete hispanosenegalés, máxime cuando la necesidad aprieta y su contribución, por mínima que fuera, permitiría salir del atolladero.

De un tiempo a esta parte, a Sekou se le ha visto lento y hasta con apariencia de sobrepeso. Pese a ello, la coartada de la reglamentación actual, con una convocatoria de hasta 23 jugadores debido a la pandemia, le ha permitido entrar en las citaciones. Aunque para nada. En los siete últimos partidos ha disputado... ¡10 minutos! Fueron de una tacada en la recta final en Fuenlabrada, con el marcador en contra. Pero ante la Real Sociedad B volvió a estar lesionado (por cuarta vez esta temporada) y se quedó en el banquillo contra el Cartagena, Amorebieta, Ponferradina, Huesca y Girona. Con mejor o peor resultado para el Málaga, Natxo González ni siquiera recurrió a él y prefirió otras alternativas. Nadie se sorprendió en el vestuario. Probablemente lo que sí llama la atención es que, en vez de ir convocado, no se haya quedado en tierra ejercitándose en sesiones individuales para ofrecer un estado de forma digno.

Hubo que esperar al final de la primera vuelta para que Sekou encadenara tres partidos de Liga como titular. Ocurrió contra el Burgos, el Amorebieta y el Eibar (en este último llegó incluso a marcar el primer tanto malaguista), pero desde ahí su caída en picado ha sido frustrante. En toda la segunda vuelta no ha disputado ni los minutos equivalentes a un encuentro completo (lleva 88 y repartidos en cinco actuaciones) y no va a quedarse muy lejos de los números de Orlando Sá la pasada temporada.

Eso sí, conviene recordar que el portugués fue fichado a coste cero, con evidentes problemas físicos y, en realidad, porque se temía que el mercado no pudiera deparar otra opción. Orlando Sá acabó con 18 partidos y tres titularidades mientras que el hispanosenegales cuenta con 17 y 5. Es decir, a estas alturas todavía no ha igualado los compromisos ligueros disputados por su antecesor en el puesto de 'nueve'. Por esa razón la 'cláusula del miedo' apenas tiene relevancia esta vez. El fichaje estelar es intrascendente en el Málaga.