La llegada de Caye Quintana, además de ser el séptimo fichaje del nuevo proyecto y el segundo delantero del verano en el Málaga, supone también un símbolo. Que este movimiento, que estaba cerrado desde la semana pasada y fue frenado por LaLiga, haya salido adelante significa que el club malaguista ha vuelto a salvar un 'match ball' desde los despachos cara a poder reactivar la reconstrucción del equipo y continuar con el ERE en marcha, que acabará por despedir a aquellos jugadores con altos salarios que no salgan mediante un acuerdo amistoso.
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Según aseguran desde la entidad que ahora mismo gestiona el administrador judicial, José María Muñoz, el Málaga ya ha resuelto los impagos que tenía con algunos de los futbolistas y que ante la decisión de emprender un proceso de despido colectivo decidieron denunciar al club por estas partidas de la temporada pasada que aún no habían recibido. Según pudo conocer este periódico, este montante se elevaría por encima de un millón y medio de euros.
Una cantidad que el Málaga ya habría conseguido para destinarla a satisfacer esos retrasos (antes de lanzar el ERE y de que los jugadores denunciasen –al final fueron cuatro en total–, club y futbolistas estaban negociando que este pago se distribuyese en varios plazos durante el siguiente año), lo que da carpetazo a posibles consecuencias que podrían haber afectado notablemente al equipo, que de no pagar esas nóminas habría sido objeto de consecuencias federativas, es decir, en aspectos de competición y deportivos.
Todo esto está previsto que lo ratifiquen desde la comisión mixta LaLiga y la AFE (sindicato de jugadores). Este paso adelante, sumado a las salidas ya de varias fichas consideradas inasumibles, permitió que LaLiga haya vuelto a abrir la puerta a nuevas llegadas en el equipo blanquiazul, que espera también solventar el máximo posible de inscripciones de nuevos jugadores de cara al inicio de la competición el próximo domingo en Tenerife. Aunque por el momento será un proceso lento, porque la mayoría de jugadores a los que el club pretende dar salida todavía no la tienen: es el caso de Juanpi, Luis Hernández, Lombán, Diego González, Juan Carlos, Rolón, Renato y Dani Pacheco.
En cambio, lo hecho hasta ahora será sufiente para empezar a tramitar las inscripciones para los nuevos fichajes. Según pudo comprobar este medio, desde LaLiga han vuelto a darle respiro al club blanquiazul y abrirle la posibilidad de inscribir a las nuevas caras tras las últimas salidas que se están confirmando, desde las de Munir (firmó libre en el Hatayspor) y Adrián (también libre, se comprometió con el Zaragoza), que son oficiales, hasta las que están muy cerca de resolverse, como son las de Juan Carlos y José Rodríguez.
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Además, otro factor clave para entender estos recientes avances es la bomba de oxígeno que supuso el traspaso de Mula al Fuenlabrada, que según fuentes cercanas se habría cerrado en torno a un millón. Mientras, sigue a la espera Luis Muñoz, a quien el club trata de cerca y le ha asegurado que será el próximo en incorporarse cuando se confirme otra salida: valdría con la de Juan Carlos, y no con la de José Rodríguez, que no tiene ficha. En este sentido, el acuerdo con el canterano Luis Muñoz ya estaba cerrado.
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