La hora de los veteranos en el Málaga

Es cierto que el proyecto del Málaga, con el director deportivo Loren Juarros a la cabeza, se sustentó en la apuesta de canteranos como Dani Lorenzo, Roberto, Kevin o Larrubia, y que estos tuvieran un gran peso. Pero para acompañar a estas promesas, llegó también una ristra de futbolistas con más trayectoria, en Segunda División incluso, para formar una columna vertebral que sostuviera al equipo. Estos son por ejemplo Nelson Monte, Víctor García, Juanpe, Manu Molina, Sangalli o Dioni, que se unieron a Genaro, otro pilar de la planificación que ya estaba en el club. Y en invierno llegaron Ferreiro, el más experto, y Avilés, con varias años en Segunda.

Sin embargo, estos futbolistas no están marcando la diferencia cuando deberían de ser los que sumasen algo de claridad dentro del bloqueo general. Y lo preocupante es que unos han pasado de un rendimiento notable a ofrecer actuaciones muy insuficientes. Un ejemplo es Nelson, que quedó señalado por un grave error de colocación ante el Mérida que supuso un gol en contra; o Genaro, que ha pegado un bajón hasta el punto de perder la titularidad ante el San Fernando, cuando en gran parte de la temporada ha sido una pieza fundamental, casi un talismán.

Víctor García fue uno de los mejores asistentes desde el lateral izquierdo en la primera vuelta, y tras una lesión no ha vuelto a ser el mismo. Lo mismo le ocurrió a Dioni, que está por debajo de su media goleadora y después del percance que sufrió ante el Intercity no ha recuperado su mejor versión. El malagueño se desquitó con un gol ante el Mérida, pero en San Fernando volvió a pasarlo muy mal sin balón y apenas pudo hacer varios remates. La explosión de Roberto le ha dejado un poco en segundo plano, pero se echa en falta que imponga su jerarquía como un jugador histórico de la tercera categoría. Así llegó el pasado verano a Málaga, donde quizás la presión por ser profeta en su tierra también le está pesando un poco.

Más inexplicables son los casos de Juanpe y, sobre todo, Sangalli. Ambos llegaron para ser dos jugadores importantes en el centro del campo y tras varias temporadas jugando en Segunda División. El Málaga hizo un importante esfuerzo económico por ellos y apenas han dado resultado. Acosados por múltiples lesiones, no han contado con ritmo en todo el curso. Juanpe sí cuenta algo más en la rotación de Pellicer, pero en el caso de Sangalli apenas juega. Desde que se lesionó en enero contra el Castellón, sólo ha sumado 45 minutos en total con tres apariciones desde el banquillo ante Intercity, Algeciras y Atlético B.

En la misma línea está Juan Hernández, otro jugador que venía de Segunda, aunque traía un expediente de lesiones del que tampoco ha logrado escapar en Málaga. Ha tenido que salir Antoñito Cordero desde el filial para hacerle competencia a Kevin, que a pesar de las múltiples oportunidades tampoco está siendo relevante. En conclusión, el Málaga, que es una de las plantillas más jóvenes de la Liga, necesita que su eje de jugadores más expertos den un paso adelante para atajar la peligrosa dinámica en la que se encuentra el equipo.