El Málaga, en busca de la resurrección cuatro meses después

Muy poco, más bien casi nada, queda de las expectativas depositadas por la afición en la figura de Guede, al que se reconoce como 'uno de los nuestros' y que sin embargo ha convertido al Málaga en una ensalada por sus alineaciones (con un montón de piezas acumuladas en la misma zona) y por sus cambios tácticos (con demasiada frecuencia, acumulación de atacantes en el tramo final sin más objetivo que evitar el desastre mediante el acoso y derribo).

Al Málaga le espera un Tenerife muy distinto. Entonces tenía plaza en los 'play-off', pero ahora, como ya le sucedió a Ramis en el Albacete tras pelear por el ascenso (en la campaña siguiente no duró mucho en el cuadro manchego), parece no haber asimilado que el contador volvió a ponerse a cero a mediados de agosto. El equipo 'chicharrero' también está sitiado por las dudas y encima ha sufrido el varapalo de la lesión de una pieza muy importante, Dauda. Pero además ha perdido de momento su gran virtud, la sincronización de movimientos, por la presencia en la parcela ofensiva de varias caras nuevas (Waldo, el referido Dauda, Borja Garcés o Appiah). Las bajas de Elady y Shashoua también le pasan factura.

De nuevo el Málaga deberá mejorar su balance en las bandas para no sufrir y también no empecinarse en el juego interior porque el rival es muy solvente con su pareja de medios centro. Eso sí, de sortear la presión arriba del rival (como hizo en mayo con Genaro retrasando su posición para ayudar a Escassi y Peybernes en la salida de la pelota), puede tener más opciones de crear peligro. Está por ver si Guede insiste en jugar con dos delanteros y con medios punta arrancando desde la banda u opta por buscar una pieza de enganche entre los centrocampistas y un solo atacante. En el eje de la defensa vuelve a contar con Bustinza, aunque a cambio Juande ha sufrido molestias musculares. La resurrección del equipo y la salvación de su entrenador pasan por ganar en Tenerife cuatro meses después de un concluyente triunfo que a la postre resultó un espejismo.