La voz de la cantera en el Málaga: «Pueden confiar en nosotros; vamos a responder»

Que Pellicer sea el técnico del primer equipo después de haberlo sido del juvenil y del filial es una ventaja fundamental. Su fuente de conocimiento sobre la cantera malaguista es primaria. De los 30 jugadores llamados a entrenarse en la actual y particular pretemporada, bajo medidas especiales, Pellicer incluyó en total a 12 canteranos, aunque dos de ellos, Keidi y Luis Muñoz, se consideran del primer equipo. Pero en total, las fichas del filial son el 40 por ciento del equipo, que sólo tiene 18 jugadores profesionales por la archiconocida sanción de LaLiga.

Ismael, Hicham, Iván Jaime, Ramón, Juande, Kellyan, Gonzalo, Julio, y los dos últimos en llegar, Dani y Quintana, son los que vienen de abajo y más cerca tienen ahora la oportunidad de ganarse el sitio. Aunque algunos ya lo consiguieron antes de la crisis del coronavirus, como Ismael, que le ganó el lateral derecho a Cifu. O Hicham, que cogió protagonismo por ser un extremo diferente. De los dribladores y atrevidos. Y para esta 'operación retorno' pudieron ser más nombres, como Cristo, Larrubia, José Carlos o Mike, porque el club intentó citar a 33 jugadores y LaLiga se lo denegó.

Y es que Pellicer cree firmemente en apostar por la cantera, no solo por necesidad. Se trata de sabia joven y ambiciosa, igual que inexperta. Porque también hay que saber abonar raíces, cuidarse de la sobrexposición y el halago fácil. Pero esto también lo sabe Pellicer, que intenta dar naturalidad al salto al primer equipo. «Estamos viendo un perfil de canterano que es humilde, trabajador, que entiende el juego, que tiene talento y que tiene mucha hambre», ha dicho en varias ocasiones el técnico.

Esto mantiene a raya los aires de grandeza a la vez que mantiene la motivación por la oportunidad de conseguir lo que han perseguido durante toda sus carreras de canterano: establecerse en la élite. Se desprende de las reflexiones de Ramón: «Estamos muy contentos por la confianza del míster y trabajando a tope para poder devolvérsela algún día. Nos dice que estemos tranquilos y que trabajemos, que con eso llegará el momento. Estamos muy ilusionados por esta confianza. Tenemos muchas ganas de demostrar que se puede confiar en la cantera y nosotros vamos a responder. Estamos deseando que nos den caña», declaró el centrocampista.

Lo calcó Juande: «Estoy muy motivado y muy contento, para mí es un orgullo». La lección está aprendida. Para casi todos está siendo un año de primeras veces, como define el delantero Julio: «Un año difícil, pero inolvidable. He cumplido mi sueño, para el que tanto he trabajado», reconoció el pichichi del filial con 14 goles, pero con pocos minutos aún en el primer equipo. Todos han tenido, más o menos, sus primeros pinitos en el primer equipo, salvo Iván Jaime, que lo vivió la temporada pasada- y se ve con condiciones.

También saben que se viene una época de rotaciones por la gran exigencia física que supondrá un final de Liga exprés con partidos cada dos días. Y ahí estarán ellos. «El objetivo es ir a por más, con más trabajo, y seguro que será muchísimo mejor el siguiente año», reconoce Ramón. Y es que otra cosa que comparten esta camada de jugadores es que el club los tiene 'atados', con contrato en vigor (de estos, sólo Kellyan termina contrato esta temporada) y convencidos de la oportunidad de la que pueden llegar a disfrutar ahora o de cara la temporada que viene. También como trampolín hacia otros proyectos que podrían también dejar dinero en el club.