El Málaga aprueba el trabajo de Pepe Mel y confía en él para conseguir la salvación

Se van a cumplir tres meses desde la llegada de Pepe Mel al Málaga para suplir a Pablo Guede y su fichaje no ha tenido el efecto esperado en la clasificación, donde el equipo sigue en zona de descenso y distanciado a cinco puntos de los puestos de salvación. Sus resultados al frente del conjunto blanquiazul están lejos de los deseados tras cinco derrotas, siete empates y sólo dos victorias en 14 partidos de Liga. Son números que expuestos en crudo, sin más factores, ponen en cuestión su labor.

En cambio, estas cifras no reflejan de forma completa el trabajo del preparador a ojos de los directivos de la entidad de La Rosaleda, que aprueba por el momento la etapa de Mel como positiva según pudo recabar este periódico. Para la dirección deportiva, con Manolo Gaspar a la cabeza, no existe debate alguno sobre la idoneidad del entrenador para la situación que lleva atravesando desde hace ya varios meses equipo. El club blanquiazul considera que es la figura adecuada para conseguir el objetivo de la salvación a pesar de que su efecto en cuanto a los resultados avance a un ritmo insuficiente aún para lograr la meta de la permanencia.

En las oficinas de Martiricos transmiten que son conscientes de la necesidad de tomar decisiones para corregir el rumbo, pero están de acuerdo con que estas medidas deben ir en otra dirección. Es decir, miran a la plantilla y los fichajes y salidas que se puedan conseguir. Los argumentos desglosados desde la plana mayor del Málaga para no volver a cambiar de entrenador y seguir confiando en Pepe Mel son varios.

El más repetido es el de que el técnico madrileño ha logrado una mejoría en el plantel. Que ha logrado ordenar y organizar los recursos de una plantilla descompensada y donde la mayoría de los fichajes no han cumplido con las expectativas hasta ahora. También destacan que el experimentado preparador (con gran cartel a nivel nacional y un amplio curriculum en Primera y Segunda) ha ofrecido lo que buscaban de él a la hora de mostrar liderazgo y saber estar ante una coyuntura muy delicada.

En resumen, valoran como positivo el trabajo de Mel más allá de los resultados e insisten en que confían que los efectos de su mano se van a empezar a ver en forma de victorias y puntos próximamente porque el equipo está cerca de alcanzar la fortaleza suficiente para llevarse el gato al agua en partidos como el del domingo pasado ante el Ibiza, donde después de ir ganado 0-1 hasta el minuto 70 acabaron concediendo el empate por una mala segunda parte que eclipsó una buena actuación durante la primera.

Otros de los motivos por lo que ni se plantea un nuevo cambio de entrenador es por el trastorno que supondría empezar casi desde cero con otro técnico al mando, por más que este tenga un estilo similar al de Pepe Mel. Al contrario, la apuesta por la forma de trabajar del ex del Betis entre otros sigue siendo firme por parte del Málaga, desde donde destacan además que está empleándose codo con codo junto a la dirección deportiva para consensuar los mejores fichajes posibles para reforzar al plantel.

Sin embargo, esta situación de confianza no está libre de fluctuaciones y aunque ahora los malos resultados no ejercen una excesiva presión sobre la figura de Pepe Mel (ni en el club, pero tampoco entre la afición) en un futuro reciente puede cambiar a no ser que se cumpla la previsión del técnico de salir del descenso a finales de enero. De esa forma confirmaría la apuesta del club de ir con él hasta el final del curso, como poco.

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