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La enésima vuelta de tuerca al once malaguista, en plena crisis de juego y resultados. desmontó como nunca la planificación de la plantilla. En un ... Málaga sobrado más que nunca en su historia de medios punta o de volantes de corte creativo, ayer no jugó de salida ninguno de ellos. No estuvieron de salida Febas, Fran Villalba, Álex Gallar (que en este caso era baja por una contractura muscular), Jozabed, Ramón ni el canterano Dani Lorenzo. Ni moviéndose en zonas interiores ni en las bandas.
Fue un detalle de lo más elocuente. A estas alturas Pepe Mel sigue tratando de de dar con la tecla y su apuesta fue un 4-4-2 esta vez, con Loren ayudando a Rubén Castro en el ataque y con dos extremos puros, un Hervías que comenzó con mucha convicción, incluso buscando el uno contra uno, pero que se limitó después a poner varios centros a balón parado sin acierto en todo lo demás, y un Cristian que fue el mejor del equipo, en empeño e incluso recursos, aunque dentro del pésimo nivel medio de todo el equipo.
Quizás la idea de Mel era hacer daño en transiciones más rápidas, como esa inicial que tuvieron Loren y Cristian, con tiro desacertado del marbellí, asumiendo las limitadas opciones de sorprender en un ataque estático. Lógicamente, si con el 4-4-2 se gana en resolución en el área y se acompaña mejor a Rubén Castro, que sigue desconectado del equipo pese a todo, la contrapartida es que se pierde control del balón, manejo del juego en el centro del campo, con la pareja formada por N'Diaye y Luis Muñoz por dentro. Pero lo cierto es que el Málaga tampoco ha sabido sacar partido ninguno en las jornadas anteriores de la presencia de dos, tres o hasta cuatro de los medios punta en la alineación.
Tras el descanso, con el marcador en contra, fue el turno de Febas, con N'Diaye retrasado a la defensa, y el Málaga acabó con Ramón también en el campo, ejerciendo donde más le gusta a Mel, como 'pivote' puro, para buscar un primer pase sencillo y una salida más correcta del balón. Lo cierto es que, especialmente el ilerdense, no fue ni mucho menos un revulsivo y recibió pitos de la grada por su poca claridad de ideas con el balón en más de un lance del partido.
Eso sí, el Málaga mantuvo esta vez su 4-4-2 todo el choque, con el matiz de que en el final del partido fue Fran Sol el que reemplazó a Loren en el once. En cualquier caso y pese a la disputa de varios partidos en un lapso breve, el Málaga sigue experimentado una revolución en su once antes de cada partido. A la ya vivida en Cartagena se sumaron cinco cambios más ayer, porque entraron en la alineación Escassi, Bustinza, Hervías, Cristian y Loren, que fue otro de los que más batalló, aunque sin opciones de lucimiento alguna.
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