La campaña de abonados del Málaga se dará a conocer mañana, en plena efervescencia por el ascenso del primer equipo a Segunda División, y la principal premisa en ella es que se mantendrán los precios para los carnés para la amplia masa de fieles en la temporada recién concluida en Primera RFEF. Es un premio a uno de los pilares para el éxito final en lo deportivo del curso 2023-24.
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«Nuestra idea es mantener los precios a los abonados que han estado con nosotros todo el año», confirmó a este periódico el director general del Málaga, Kike Pérez. Hay que aclarar que en la anterior campaña de abonados hubo 7.200 malaguistas que tuvieron un descuento adicional del 25% (de 112,5 hasta 397,5 euros como precio final, y 82,5 y 251,25 para el público joven) por acudir a los siete últimos partidos en La Rosaleda previos al duelo de la última jornada ante el Ibiza en Segunda, en la 2022-23. Esto ya desaparece cara a la campaña que se va a dar a conocer mañana.
«Hemos tenido una asistencia media de casi 22.000 espectadores, y ellos son los que han creído hasta el final en lo que ha pasado (el ascenso). Es una pequeña manera de premiar esa fidelidad que han tenido a estos colores», celebró Pérez, que confía en que el Málaga pueda elevar su techo de abonados con el aliciente de competir los próximos meses en una categoría superior, con el ansiado regreso al fútbol profesional y con un elenco histórico este curso, con dieciocho de los veintidós participantes con pasado en Primera División.
Dado que La Rosaleda tiene un aforo en torno a los 30.000 asientos (esta campaña se ha colgado el cartel de 'no hay billetes' en varias ocasiones sin alcanzar el lleno real final), hay un margen de crecimiento en la masa social respecto a los 20.000 socios en Primera RFEF, que ya de por sí era una cifra casi insólita para la categoría.
Kike Pérez (director general del Málaga), sobre la congelación de precios
Pérez sólo se marca un techo para crecer: «Para aficiones visitantes tenemos reservados 700 asientos, pero no nos ponemos ningún otro. Ojalá estuviera La Rosaleda llena todos los fines de semana, que yendo todo así estoy seguro de que es el techo que se va a conseguir antes o después».
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Asimismo, el dirigente malaguista reconoció que «los nuevos abonados tendrán un incremento distinto al de las renovaciones, pero es mínimo». También aclaró que «los abonos infantiles valdrán 60 euros todo el año. Los precios son totalmente de Primera RFEF, no hemos querido tocar nada».
Finalmente, el Málaga se congratula de la expectativa de una Segunda con cinco clubes andaluces (Almería, Cádiz, Granada y Córdoba también), todos de capitales de provincia. «Es una maravilla, porque vamos a ver derbis muy bonitos, que arrastran mucha afición y para ellos habilitaremos seguramente más entradas», sostuvo, aunque es muy probable que en las próximas semanas representantes de estos clubes se reúnan para adoptar medidas sobre precios y volumen de entradas que se puedan pactar de antemano para estos choques.
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En todo caso, conviene recordar que la horquilla de precios en las renovaciones la pasada campaña de abonados fue de 140 a 420 euros, y de 160 a 485 para las altas, mientras que en los abonos jóvenes iban de 110 a 335 las renovaciones, y 130 a 385 las nuevas incorporaciones.
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