El Málaga confirma la lesión de Ramón y prevé que se pierde lo que resta de temporada

El parte médico en concreto describe que Ramón Enríquez sufre una lesión miotendinosa en el recto anterior del cuádriceps derecho, es decir, un tipo de desgarro muscular. Las mismas fuentes precisan que no es una recaída de la afección que padeció el pasado diciembre, aunque la nueva dolencia sí ha surgido en una zona cercana y podría ser similar a la última vez, cuando le llevó alrededor de dos meses recuperarse.

Es un duro golpe sobre todo para el joven futbolista granadino formado en la cantera malaguista, que vuelve a ver frenada su prometedora proyección por un problema físico. Sólo ha podido sumar minutos en cinco partidos este curso desde que reapareció a finales del pasado marzo en La Rosaleda contra el Linares tras casi un año sin poder jugar por dos lesiones de gravedad consecutivas. Y el pasado domingo, en su primera titularidad desde entonces, tuvo que pedir el cambio.

Fue en el minuto 21 del encuentro contra el Mérida en casa. Ramón sintió las molestias en su cuádriceps y pidió el cambio tal y cómo el cuerpo técnico le había pedido ante cualquier situación. El objetivo era evitar una situación peor y en un principio el Málaga quiso ser prudente sobre una posible lesión. Sin embargo, las molestias de Ramón persistieron con las horas y las pruebas médicas determinaron que tiene que volver a parar.

Es un chasco importante para el jugador y su entorno, pero también para el Málaga, que tenía muchas esperanzas en recuperar al mejor Ramón con el fin de ser una pieza clave en la lucha por el ascenso a Segunda División. En sus primeros minutos de esta temporada dejó muy buenas sensaciones y confirmó que es quizás el jugador con más talento y criterio con el balón. Que la Primera RFEF se le quedaba pequeña y sería diferencial en cuanto recobrase el ritmo de competición.

En cambio, Ramón y el Málaga vuelven a ser víctimas del infortunio. El equipo blanquiazul pierde otra vez a uno de sus mejores jugadores y la frustración es enorme. La noticia ha caído como una jarra de agua fría en el vestuario, que peleará por dedicarle el ascenso a su compañero. En el club se afanan en ayudar en todo lo posible a Ramón en esta delicada situación, sin pensar ahora en que tienen una conversación pendiente sobre su continuidad, ya que el centrocampista termina contrato a finales de junio.