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Los arranques ligueros pueden dar lugar a la 'sobrerreacción', tanto positiva como negativa, puesto que es demasiado pronto para extraer conclusiones claras y vienen condicionadas a los resultados, con lo que es importante cogerlos con pinzas. Pero la realidad es que el Málaga permanece invicto en una Segunda División extremadamente competitiva, uno de los cinco equipos que conservan dicha condición junto con Levante, Eibar, Racing de Santander y Mirandés. Los malacitanos finalizan la quinta jornada en el séptimo puesto, a las puertas de las plazas que garantizan la pelea por el ascenso a Primera División a través del playoff a final de temporada, se sitúa con nueve puntos, empatado con el Huesca, su víctima en el choque del pasado sábado, y se coloca a tan solo dos puntos del líder de la competición, el Levante, que a su vez está empatado a puntos con el Racing y el Eibar.
Uno de los equipos que ha sufrido su primera derrota y se cae del grupo de clubes invictos es el Zaragoza, que perdió (1-0) ante el Burgos, en El Plantío. Tuvo ocasión de adelantarse en una instancia previa, con dos penaltis a favor (falló un penalti al filo del descanso, que el colegiado mandó repetir y que también volvió a fallar), pero fue un tanto de Álex Sancris en la última jugada del encuentro lo que otorgó la victoria al conjunto burgalés, que sumado al triunfo del Mirandés (2-0) sobre el Albacete, provocaron que el Málaga saliera de los puestos de playoff, aunque tiene los mismos puntos que el Mirandés, que ocupa la sexta posición en la tabla.
El del Málaga en su regreso a Segunda División es un inicio que supera con creces los pronósticos más optimistas con respecto a su rendimiento en la categoría de plata, ya que se trata de un equipo recién ascendido y que logró dicha promoción de manera milagrosa. Pero a pesar del sólido arranque del conjunto malaguista en Segunda División, con el primer tiempo frente al Huesca como confirmación de que el cuadro de Martiricos tiene armas para competir con equipos de entidad, el Málaga debe mantenerse cauto y no dejarse llevar por el entusiasmo que puede generar el encontrarse en la zona noble de la tabla. El objetivo primordial debe ser el asegurarse la permanencia en la Liga Hypermotion a la mayor brevedad posible, y después podrá soñar por alcanzar cotas más altas.
Este es el mismo mensaje que Sergio Pellicer busca transmitir en todo momento, el de la tranquilidad y la cautela, y en la rueda de prensa después del triunfo volvió a hacer especial hincapié acerca de cuál debe ser la meta del Málaga este curso. «Tenemos nueve puntos, nos quedan 41 (cantidad de puntos que comúnmente se consideran los necesarios para asegurar la permanencia en Segunda División). Puede sonar repetitivo pero es así. Lo de estar en playoff hoy no quiere decir nada. Otro día seguramente estaremos en otra posición», valoró el entrenador malaguista.
En estos primeros compases de la competición, el Málaga ha mostrado diferentes versiones. No cabe duda de que Pellicer se queda con la imagen que mostró el equipo en la primera parte ante el Huesca y algunos tramos frente al Albacete, y alejarse de actuaciones como la del encuentro en el Nuevo Arcángel. Pero es innegable que el rendimiento del Málaga en este inicio de curso es una grata sorpresa, aunque todavía quedan kilómetros por recorrer en la larga carrera de fondo que es la Segunda División.
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