El Málaga, fiel a su filosofía de acercar la cantera al primer equipo hasta el final

El Málaga de la temporada que ahora se cierra será conocido, entre otras cosas, por su filosofía de cantera, una idea que demostró hasta el último día. Frente al Castellón debutaron en una convocatoria con el primer equipo hasta tres jugadores, llegando de esta manera a utilizar hasta el dorsal 53 en las camisetas blanquiazules. La explicación es que para esta vez el primer equipo no contó con los jugadores del filial que son más habituales en el banquillo malaguista porque estos se encontraban reforzando al segundo equipo, el Atlético Malagueño, en su pelea por acceder a la final por el ascenso a la Segunda RFEF, una de las nuevas categorías creadas por la Federación.

Mientras el filial estaba en Torredonjimeno, donde logró una gran victoria por 1-3, a La Rosaleda acudieron boquiabiertos varios juveniles, los cuales han vivido una semana de ensueño porque también consiguieron proclamarse campeones de Andalucía el pasado miércoles. Aunque no era necesario, el Málaga decidió completar su lista de convocados con hasta seis efectivos que aún no tienen edad sénior. Estos fueron Haitam, Andrés, Roberto, Christian, Bilal y Recio (para estos tres últimos era la primera vez en el banquillo del primer equipo).

De este grupo tuvo hasta un cuarto de hora de juego el extremo Haitam, una de las mayores perlas de La Academia, que recientemente ha sido convocado con la selección sub-23 de Marruecos y que ya tuvo varias apariciones en el primer equipo en jornadas anteriores. Quién sí debutó fue el malagueño Andrés. El central de Rincón de la Victoria, de tan sólo 17 años (es aún juvenil de primer año), ingresó en el terreno de juego a falta de diez minutos para sustituir a Juande, que se tuvo que retirar por molestias musculares, fruto de un gran desgaste durante el curso, en el que ha sido el jugador del Málaga con más minutos.

Precisamente la historia de Juande es una referencia entre los canteranos por su crecimiento exponencial en algo más de un año, donde ha saltado del filial para ser un pilar fundamental del primer equipo. De hecho, fue una apuesta decidida desde el principio y ascendió a jugador con ficha de profesional. Esa es la ilusión de todos los que este año han tenido la oportunidad de codearse con los 'mayores' en algún momento por la escasez de efectivos en la primera plantilla. Esto ha facilitado a la dirección deportiva generar un pasillo diáfano que ha acercado a los canteranos al fútbol profesional.