Con las últimas incorporaciones del extremo Pablo Hervías y el medio punta Fran Villalba, el Málaga vuelve a quedarse sin hueco en el límite salarial para más fichajes ambiciosos (sí hay espacio para pequeñas operaciones). La primera vez fue poco antes de activar la 'operación ... salida' (Peybernes, Kevin y Roberto, entre otros), y ahora lo hace en otro escenario muy diferente.
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Tras doce nuevas incorporaciones en lo que va de verano y sumando los contratos ya firmados en temporadas anteriores, el club ya ha consumido casi al completo su partida de algo más de 7,3 millones para salarios de jugadores de cara a la campaña 22-23. Esto no significa que el equipo esté en una situación comprometida, de hecho LaLiga permite a las entidades saneadas excederse un poco más si está justificado.
El club llega a este punto del verano con la convicción de que puede dar por cerrada su plantilla si así debe ser, pero esta es una afirmación que desde la entidad hacen con ciertas reservas porque aún quedan dos semanas para el cierre del mercado de fichajes hasta el próximo 1 de septiembre.
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Borja Gutiérrez
En ese tiempo hay suficiente margen para que puedan presentarse ciertas situaciones que permitirían hacer algún cambio más para mejorar la plantilla (en este sentido, la dirección deportiva sigue rastreando las posibilidades del mercado en cuanto a laterales y delanteros).
Estas situaciones van desde la salida de jugadores (la continuidad de Chavarría sigue en entredicho y no se descarta nunca, aunque es menos problable, alguna oferta de traspaso) a la contratación de nuevos patrocinadores que incrementen el presupuesto para fichajes (cabe recordar que la entidad está barajando ponerle un apellido comercial al estadio La Rosaleda).
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Pero, una vez con algo más de dinero en mano, no siempre es sencillo seguir fichando porque dar con jugadores disponibles que encajen en el equipo y puedan mejorar lo presente se complica. Sin embargo, las últimas semanas siempre se prestan a las sorpresas y a la aparición de oportunidades que a principios de verano eran insospechadas.
Estas pueden llegar a raíz de ofrecimientos de jugadores que buscan una salida de última hora de sus equipos actuales y presentan una condiciones ventajosas que podrían ajustarse al presupuesto. Es por esto que la dirección deportivo malaguista sigue muy atenta al mercado y sus vicisitudes.
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La foto actualizada de la plantilla malaguista con las últimas caras nuevas (Hervías y Villalba serán presentados al público la semana que viene) refleja un vestuario compuesto por 20 fichas profesionales. Es decir, una plantilla corta que se corresponde con el plan previsto y transmitido al principio del verano por el Málaga.
Cabe recordar que aún queda por resolverse la situación del delantero Adrián López, quien sigue entrenándose a prueba con el equipo. La entidad y el veterano futbolista asturiano quedaron en tomar una decisión al final del mercado de fichajes. Será cuando el Málaga valorará seguir contando con él y hacerle ficha. Es una operación factible porque no supondrá un gran desembolso contratarle.
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